La incertidumbre que la crisis sanitaria del coronavirus ha generado en la sociedad salpica, lógicamente, al fútbol. Con una situación tan cambiante en apenas días, las autoridades competentes están encontrando serias dificultades para trazar un futuro a corto plazo y en el caso del deporte el principal caballo de batalla es la asistencia de público a los recintos deportivos. En el caso del Córdoba CF, esa incertidumbre ha provocado que la campaña de abonados se demore, al menos, hasta la próxima semana, cuando en el club tenían la idea que viera la luz en estos días.

Tantos las autoridades sanitarias como los estamentos que rigen el fútbol español asumieron al principio de la pandemia que las competiciones tendrían que celebrarse a puerta cerrada, como mínimo, hasta el próximo mes de enero. Sin embargo, la evolución de la crisis sanitaria y los protocolos desarrollados para la prevención de los contagios han hecho que esos plazos empiecen a acortarse.

El propio Javier Tebas, presidente de LaLiga, habló abiertamente de un regreso de los aficionados en cuenta la situación del país lo permita. En ese contexto, hay clubes como Las Palmas que incluso han solicitado ya que sus abonados puedan estar presentes en los partidos que disputarán como local en el cierre de este ejercicio. En medio de esos escenario, el Gobierno de España ha especificado, y así lo recoge el BOE, que será el Consejo Superior de Deportes, en consulta con los organizadores de las competiciones, el Ministerio de Sanidad y las Comunidades Autónomas el encargado de marcar la pauta en la vuelta a los estadios.

En el caso de la Segunda División B, el panorama no está aún demasiado claro. Los clubes, y entre ellos el Córdoba, están convencidos de que podrán empezar el próximo curso con sus aficionados en los estadios. Pero la ausencia de certezas hace muy complicado plantear una condiciones concretas que se reflejen en una campaña de abonados, con el peligro que supondría no poder cumplir con lo prometido a los aficionados.

Esa incertidumbre, según ha podido saber el Día de fuentes de la entidad cordobesista, es la que ha frenado y retrasará unos días la presentación de la campaña de abonados del Córdoba CF. Pese a los lógicos reparos que la situación requiere, los rectores del club blanquiverde tienen ya varias propuestas estudiadas y presentadas a los dueños de la entidad en Bahréin. Todo ello bajo la idea de que sea una campaña agresiva y que enganche al aficionado al tren del ascenso que quiere coger el equipo que entrenará Juan Sabas.

Pero para conocer todos los pormenores de esa campaña social, los seguidores blanquiverdes tendrán que esperar aún unos días más, con la esperanza de que los acontecimientos en estas próximas fechas arrojen alguna certeza más sobre las posibilidades de que el público vuelva a los estadios allá por el mes de octubre, cuando se espera la vuelta a la competición.

La vuelta del fútbol profesional en Primera y Segunda División, inicialmente a puerta cerrada, supondrá un primer paso en la desescalada de las competiciones en España. Un inicio de lo que puede ser la vuelta progresiva de los aficionados a los estadios, factor que para el Córdoba puede ser diferencial en su balance de ingresos de cara al ejercicio 2020-2021.