El Escáner | Jornada 33

El Córdoba CF y una línea maestra en El Arcángel

  • Los blanquiverdes, con un claro estilo de juego, se abonaron al triunfo durante toda la temporada en casa gracias a su superioridad física y su poderío ofensivo, en el que anotaron 57 goles en 17 citas

José Alonso, Bernardo y Casas felicitan a Ale Marín tras su gol al Ceuta.

José Alonso, Bernardo y Casas felicitan a Ale Marín tras su gol al Ceuta. / Miguel Ángel Salas

El Córdoba CF tenía claro que el gran objetivo del ascenso pasaba por recuperar su estatus en El Arcángel. El coliseo ribereño debía ser un fortín. Y lo cumplió a la perfección gracias a la línea maestra de un Germán Crespo ambicioso. Los blanquiverdes se abonaron al triunfo durante toda la temporada ante su afición gracias a su estilo de juego, su superioridad física, técnica y táctica y su poderío ofensivo, al anotar 57 goles en los 17 compromisos disputados en el coliseo ribereño.

Con una clara seña de identidad, el Córdoba CF fue derrumbando muros a lo largo del presente campeonato. Todo fue rodado. Ni las lesiones pudieron frenar a un conjunto blanquiverde que superó cualquier tipo de problema. Nadie pudo con los de Germán Crespo en un Reino cordobesista que vivió una temporada para el recuerdo.

Con un 4-2-3-1 o un 4-4-2, los dos sistemas más usados por Germán Crespo, el Córdoba CF ha superado a rivales inferiores que buscaron defender con uñas y dientes o a otros conjuntos que fueron al cara a cara y salieron duramente goleados. Hubo de todo en una campaña en la que los cordobesistas no dieron opción a la duda gracias a su juego combinativo.

Sólo tres equipos perdieron por la mínima en el coliseo ribereño: el Don Benito (3-2), el San Roque (2-1) y el Ceuta, que ha sido el último en visitar el feudo blanquiverde (3-2). Estos tres conjuntos incomodaron a los de Germán Crespo, pero al final la pegada decide y ahí el Córdoba CF gana cualquier batalla gracias a la munición que han aportado Antonio Casas, Willy Ledesma, Miguel de las Cuevas, Adrián Fuentes, Simo o Luismi. 

Los blanquiverdes, que empezaron la temporada en casa ganando al Cádiz B (3-1), con el que la cerraron la campaña pasada, tiraron la casa por la ventana y sellaron hasta ocho goleadas en este ejercicio en su feudo. El San Fernando, Las Palmas Atlético, el Panadería Pulido o el Tamaraceite, rivales que han consumado su descenso de categoría, no pudieron frenar el ímpetu cordobesista. Tampoco lo hicieron conjuntos como el Cacereño, el Mérida, el Vélez o el Xerez DFC.

La superioridad manifiesta del Córdoba CF fue total: por plantilla, por juego y por ganas. Además, los blanquiverdes aprovecharon las debilidades visitantes para cerrar partidos en las segundas partes, momento en el que el físico de los rivales empezaba a flaquear. Hubo de todo, como en botica. Pero solo hay que ver la media de más de tres goles por encuentro para esbozar un cuadro de Germán Crespo con las ideas claras y con hambre de fútbol.

Con 51 puntos, todos los posibles en casa, en su casillero, una cifra que valdría por sí sola para estar actualmente en zona de play off. De hecho, son los puntos que suma el Ceuta, su último rival en El Arcángel, que marcha cuarto en la clasificación y que se jugará su pase a las eliminatorias de ascenso en la cita final ante el Cacereño. Todo una barbaridad de lo que han sido capaces un cuadro cordobesista que fue el primero en cerrar su salto de categoría. Este domingo lo logró el Numancia de Soria también. Nadie más. 

Incluso con los deberes hechos, el Córdoba CF no ha frenado su competitividad y su ambición por ganar todo en casa. Lo hizo posible y logró sellar un nuevo récord tras mejorar los 17 partidos ganados de la campaña 1956-57. El premio definitivo a un curso sobresaliente en el que Germán Crespo hizo partícipe a todo los jugadores de su plantilla, otro aspecto clave en el devenir del campeonato.

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