De verse prácticamente abocado al play off como vía secundaria para pelear por el ascenso a Segunda División, a ganarse por méritos propios el verse metido de lleno en la pelea por el primer puesto. El Córdoba CF culminó con su victoria ante el Atlético Baleares un mes y medio casi perfecto de competición, que le ha servido para protagonizar una espectacular remontada y acechar ya tanto al Castellón como al Ibiza en esa pugna por el liderato, justo antes de la trascendental visita a Castalia.

Los de Iván Ania han cuajado seis jornadas con un desempeño sobresaliente que han encontrado, además del premio de los puntos sumados, más fruto del esperado debido al estancamiento del Castellón y el Ibiza, cuyos resultados han terminado por confirmar que el ritmo avasallador que habían impuesto en la primera vuelta del campeonato era poco menos que imposible de sostener.

El Córdoba CF alcanzó su punto más distante respecto de la primera plaza el pasado 27 de enero, tras empatar en El Arcángel con el Real Murcia (1-1). Los blanquiverdes arrancaron el 2024 cayendo ante el Real Madrid Castilla y, aunque ganaron al Intercity, volvieron a dejarse dos puntos en Huelva. Con un solo triunfo en esas cuatro primeras jornadas tras el parón navideño, el Castellón disparó su ventaja hasta los 14 puntos y el Ibiza se fue hasta los 12.

Parecía entonces que el primer puesto era un objetivo imposible de alcanzar para el Córdoba CF, pero el fútbol se ha encargado, apenas mes y medio después, de demostrar todo lo contrario. El fútbol y el buen hacer de los blanquiverdes, que han firmado un excelente 16 de 18 en lo que a puntuación se refiere, sellando cinco victorias (ante Linares, Atlético de Madrid B, Melilla, Antequera y Atlético Baleares) y un empate (en Ceuta).

Ese estirón del equipo entrenado por Iván Ania se ha visto acompañado del desfallecimiento del Castellón y el Ibiza, que han bajado sus prestaciones de manera considerable. Especialmente llamativo es el caso del conjunto ibicenco, incapaz de sumar más de seis puntos en las últimas seis jornadas de liga. Los celestes han ganado un partido, igualado tres y perdido dos. Números muy pobres que han permitido al Córdoba CF recortar la friolera de diez puntos hasta situarse a solo dos de la segunda posición de la tabla.

Y el Castellón no es que haya hecho unos números mucho mejores. Los albinegros han firmado dos triunfos, dos empates y dos derrotas, dejándose igualmente un buen puñado de puntos por el camino que han permitido al CCF ver ya la primera plaza a seis de distancia, tras recortarles ocho puntos, justo antes de visitar Castalia en un duelo que puede poner a los de Ania a tiro de un partido de ese ansiado primer puesto.

Con 11 jornadas todavía por delante y a la espera de rendir visitar a los dos primeros clasificados, el Córdoba CF afronta el tramo final de liga en Primera Federación en una situación privilegiada. No es el que más puntos tiene, pero sí se ha hecho acreedor de la dinámica más sólida justo cuando ganar cada semana se complica hasta el extremo, algo que están sufriendo en sus propias carnes sus dos principales rivales en la pugna por el ascenso directo.

Una derrota en 20 jornadas

Aunque la remontada se ha plasmado en este último mes y medio frenético, el trabajo del Córdoba CF en ese afán por no renunciar a ningún objetivo se viene fraguando de manera clara desde hace mucho más tiempo. Son ya 20 jornadas ligueras seguidas en las que el equipo de Iván Ania solo ha perdido un partido, aquel revés ante el Real Madrid Castilla en un duelo que se escapó en el tiempo de añadido.

Las dudas que el equipo blanquiverde acumuló en las primeras semanas de liga, con cuatro derrotas y tres victorias en las primeras siete jornadas, dejaron paso a una trayectoria inmaculada que todavía no conoce el fin y que ha catapultado al Córdoba CF a una posición de privilegio para volver a la pelea por el ascenso directo con todos los argumentos.

En esa pugna espera el sábado un capítulo que apunta a ser decisivo en Castalia, uno de los partidos más exigentes de la temporada que le llega al Córdoba CF impulsado por el viento de cola que dan las victorias y reforzado por la confianza del trabajo bien hecho.