Los movimientos que el Córdoba pretende hacer en su plantilla en las próximas semanas no serán sólo de entrada. El conjunto blanquiverde aligerará también algunas fichas y en esa rampa de salida se encuentra desde hace semanas Erik Expósito. El punta canario, que no contó demasiado para Sandoval, ha pasado al ostracismo definitivo tras la llegada de Curro Torres, por lo que la finalización de su cesión es una operación cantada.

El pasado 7 de diciembre, el Día ya informó de que la dirección deportiva que encabeza Rafael Berges le había pedido a Expósito que diera un paso al frente para ganarse la confianza del nuevo técnico, Curro Torres, después de que Sandoval contara poco con él. Fue poco menos que una última oportunidad, pero el delantero cedido por Las Palmas no la ha aprovechado, por lo que su futuro en el club es negro.

Así lo reconoció en declaraciones a Cordobadeporte.com su agente, Agoney Peraza, que apuntó que están "pendientes de tener una conversación con el club en la primera semana de enero", pues Erik "no ha tenido los minutos que quisiéramos". La solución pasa claramente por la salida del jugador, del que su propio agente apuntó que "en Segunda B tiene muchas novias, y alguna de Segunda, pero ahora mismo es del Córdoba".

Con la salida de Erik Expósito, el Córdoba hará hueco en su plantilla para la llegada de un ariete que refuerce las opciones de ataque del equipo, principal prioridad de la dirección deportiva para cubrir una de las principales carencias del equipo cordobesista en lo que va de curso.