A falta de un partido para que concluya la fase regular en la Segunda División B, la temporada ha finalizado ya para Álex Robles. El lateral del Córdoba CF fue el único jugador de los blanquiverdes que fue amonestado en la clara victoria ante la Real Balompédica Linense, con la fatalidad de que era uno de los dos apercibidos con los que contaba el equipo de Germán Crespo.

De esta forma, al sumar su quinta tarjeta amarilla de la temporada, Robles será castigado con un partido de sanción y se perderá la trascendental visita del Cádiz B a El Arcángel, cita en la que se decidirá si el Córdoba accede finalmente a la Primera RFEF o se va abocado a jugar en Segunda RFEF, la cuarta categoría del fútbol español a partir de la próxima temporada.

Álex Robles cierra así un curso bastante irregular, su primero como blanquiverde, con un balance de 13 partidos disputados, con nueve titularidades y cuatro participaciones desde el banquillo, para un total de 860 minutos. El malagueño anotó además un gol, precisamente ante su exequipo, el Sevilla Atlético, en la derrota de los blanquiverdes en El Arcángel.

El Córdoba, al menos, evitó perder por sanción a Piovaccari, que era el otro jugador de la plantilla que llegaba con la amenaza de la sanción al encuentro en La Línea. Germán Crespo, de hecho, reconoció en la rueda de prensa postpartido que aguantó al italiano en el banquillo con el objetivo de evitar una amonestación, pues el partido estaba ya totalmente decidido después de la primera parte.