Urbanismo tumba el proyecto de parkings subterráneos en los cines de verano: "No es autorizable"
La GMU destaca que la iniciativa del promotor y gestor de estos espacios no se adapta al Plan de Especial Protección del Casco Histórico y lo incumple
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La Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) ha emitido un informe, firmado por la arquitecta jefe de la Oficina de Casco Histórico, Carmen Chacón, en el que se informa desfavorablemente sobre el proyecto de aparcamientos subterráneos en los cines de verano Delicias, Fuenseca y Olimpia. En el informe se insiste en que de someterse dicho proyecto a procedimiento de licencias "no es autorizable". Desde la Oficina de Casco Histórico se destaca que la iniciativa no es legal porque no se adapta al Plan de Especial Protección del Casco Histórico (Pepch) y lo incumple.
La GMU ha emitido dicho documento después que el promotor del proyecto y gestor de estos a través de Dreamworld STR, Antonio Amil, solicitara información urbanística "sobre la ejecución de garajes subterráneos en dos niveles en los tres cines de verano". Tanto el Distrito Centro como el Consejo del Movimiento Ciudadano ya habían mostrado su rechazo a la iniciativa.
"Estos tres cines de verano se encuentran especialmente protegidos, contando cada uno de ellos con una ficha de protección dentro del Catálogo de Bienes Protegidos del Casco Histórico del Pepch", ha recordado el presidente de la GMU, Miguel Ángel Torrico. El también edil de Presidencia ha subrayado que la propuesta presentada a Urbanismo "no cumple con la normativa del Pepch al afectar negativamente a elementos que están protegidos, con lo cual se ha emitido este informe desfavorable y anunciando que, de someterse a cualquier procedimiento de licencia, dicha propuesta no es autorizable", ha destacado.
El informe de la Oficina de Casco Histórico insiste asimismo en que la documentación aportada a la GMU por el promotor del proyecto es escasa; por ejemplo, la relativa a la planimetría de cada uno de los cines, Por lo que, esta falta de documentación, "resulta imposible poder realizar la comprobación de muchos de los parámetros establecidos en las fichas del Catálogo de Bienes Protegidos que afectan a las piezas con diferentes niveles de intervención, no pudiendo el presente informe pronunciarse sobre ellos", relata la arquitecta responsable de la Oficina de Casco Histórico de la GMU.
El informe también destaca que hay que considerar que este documento urbanístico (el Pepch) de protección de un BIC considera dentro de sus invariantes históricos, que los patios, jardines y áreas libres del Conjunto Histórico suponen los pulmones de la ciudad y permiten la transpiración entre el terreno natural en toda su masa y el aire, siendo soportes a su vez de la vegetación, mejorando la habitabilidad del Conjunto, así como el equilibrio bioclimático. "Esto ha sido posible mantenerlo a lo largo del tiempo gracias a la escasa ocupación histórica del subsuelo, no habiéndose producido nunca bajo los espacios libres", se incide.
Finalmente, se incide en que "sin haber podido analizar la propuesta en cuanto a la afección de algunos elementos protegidos como la fachada del cine Fuenseca a la calle Santa Marta, que presenta nivel de intervención de conservación estructural en el que no está permitido abrir huecos y es donde se plantea el acceso al pretendido garaje, se puede concluir e informar urbanísticamente que con los datos aportados en el estudio previo, la propuesta de ejecución de garajes subterráneos en dos niveles en los tres cines de verano no cumple la normativa de aplicación".
El proyecto y su rechazo
El pasado abril, el empresario Antonio Amil anunció su intención de construir los tres parkings, que sumarían en total 500 plazas de aparcamiento. A raíz de esa idea empezó a tener contacto con las diferentes áreas del Ayuntamiento implicadas, como Movilidad y Urbanismo, además de consultar con arqueólogos por si en estas zonas pudiera haber restos arqueológicos relevantes. Su idea era comenzar a construir el primero de los aparcamientos en el cine Delicias, una vez finalizada la temporada de cine de verano, trabajos que durarían hasta junio de 2026.
Además, así "damos una solución a los vecinos y a las vecinas del entorno porque, además, las plazas de este parking se pondrán a la venta en su totalidad para que los residentes puedan adquirirlas", defendía Amil. El empresario relató que "luego vendrían los otros dos, el del Fuenseca y el del Olimpia, de forma escalonada". "La segunda actuación en otro de los cines empezaría en septiembre de 2026, acabando en junio de 2027; y la última iría desde septiembre de 2027 hasta junio de 2028. La inversión total ascendería a cinco millones de euros", explicó entonces el empresario.
Días después, Consejo de Distrito Centro acordó por unanimidad en pleno mostrar su rechazo al proyecto de aparcamientos subterráneos en los cines de verano. Insistía entonces en que "la situación actual pone de manifiesto el peligro real de que nos quedemos sin cines de verano", por lo que instaba al Ayuntamiento a proceder a la adquisición de los cuatro cines y su incorporación a la programación del IMAE. "Sin perjuicio de lo anterior", el Consejo de Distrito Centro exigía a "las instituciones concernidas, el Ayuntamiento y la Junta de Andalucía, la urgente incoación de un expediente para declarar los cuatro cines como Bien de Interés Cultural, con uso preferente como cines de verano".
También se insistía en que "los espacios libres de los cines, con su especial protección, constituyen además de su carácter cultural y de relación, un único y muy relevante recurso bioclimático, al tratarse en su mayor parte (4.000 metros cuadrados) de suelo transpirable, que nos es necesario en la isla de calor que nuestro Casco representa dentro de la isla de calor de la propia ciudad. La ínfima ocupación del subsuelo, nunca bajo el espacio libre, ha conseguido que se mantenga el equilibrio bioclimático".
La negativa del Consejo de Distrito Centro la asumió y apoyó el Consejo del Movimiento Ciudadano, que emitió un dictamen en el que consideraba que “los cines de verano son un bien a proteger en nombre de toda la ciudad, porque su valor como patrimonio material e inmaterial supera los límites del propio Casco Histórico”.
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