La Universidad de Córdoba crea un dispositivo de detección de personas armadas basado en la IA

Ciencia

El sistema ya disponible para su transferencia a empresas o servicios y fuerzas de seguridad

DehesAlert, el proyecto de ciencia ciudadana para la dehesa de la Universidad de Córdoba

José Manuel Palomares y Joaquín Olivares muestran cómo funciona el dispositivo
José Manuel Palomares y Joaquín Olivares muestran cómo funciona el dispositivo / Juan Ayala

Córdoba/Podría ser el inicio de una novela, pero no, es lo que ocurrió a quince metros de un grupo de investigadores que salía a dar un paseo el 11 de diciembre de 2018 en la ciudad francesa de Estrasburgo tras una jornada de trabajo dedicada a diseñar robots de cirugía para resección de cáncer. En ese grupo de investigadores se encontraba Joaquín Olivares, catedrático en Arquitectura y Tecnología de Computadores de la Universidad de Córdoba (UCO), que fue testigo de aquel ataque yihadista al mercado de Navidad y que le sirvió como fuente de inspiración para desarrollar un sistema de detección de personas armadas basado en la inteligencia artificial (IA) y FOG Computing. Si Cloud Computing es procesar en la nube, esto es, en un servidor remoto, Fog Computing es procesar en la niebla, es decir, en dispositivos que nos rodean. 

Aquel fue el punto de partida de este proyecto, según explica Olivares, si bien el grupo de investigación que lidera ya venía trabajando de manera previa "en un sistema que redujera la cantidad de datos que se envían a la nube. Todo el mundo tenemos móvil y subimos muchísimas fotografías, montones de vídeos y, con la llegada de la inteligencia artificial, mucho más".

En concreto, el proyecto identifica personas que lleven armas mediante un dispositivo muy pequeño y barato. "La idea es que en vez de enviarlo todo a un servidor enorme en la nube, poder procesarlo en infraestructura de red. Se trata de un dispositivo muy pequeñito, coge la información y luego, a la vez que se envía, se va procesando por el camino", detalla.

Olivares indica también que lo que tenían que demostrar es que su sistema de manejo y de reducción de datos funcionaba: "Había que hacer un demostrador y tras el atentado pensamos en un sistema de detección de personas armadas, que se llama Smart Fog".

Menos información en la nube

El objetivo principal del proyecto es reducir la cantidad de información que se envía y que se procesa en la nube, mientras que lo que hace este demostrador en particular son "detecciones rápidas de posibles atracos, atentados o situaciones de riesgo". Y es que el dispositivo tiene incidencia desde el primer segundo, por lo que puede motivar una asistencia temprana por parte de las Fuerzas de Seguridad.

El Día ha comprobado cómo funciona el sistema en un aula del edificio Leonardo da Vinci del Campus de Rabanales. El dispositivo identifica de manera inmediata a una persona que lleva un arma -las armas utilizadas no han sido reales-. Una de las principales ventajas de este sistema es, según anota Olivares, su bajo coste a diferencia de los actuales sistemas de seguridad y también su "escalabilidad", por poner un ejemplo de un sistema de vigilancia en un centro comercial, si por ejemplo el servidor alcanza su límite procesando 50 cámaras a la vez, no da para 51. Con este sistema, "al servidor normalmente no le estás enviando nada, pues solo recibe imágenes en el caso de que hayan aparecido casos de posibles personas armadas, siendo muy fácil añadir muchas más cámaras sin necesitar un servidor más potente", aclara.

José Manuel Palomares en la miagen muestra cómo el sistema localiza las armas
José Manuel Palomares en la miagen muestra cómo el sistema localiza las armas / Juan Ayala

El dispositivo se puede ubicar en centros comerciales, estaciones, tiendas, bancos... "Lo único que registramos es cuando hay una incidencia. Y esa incidencia se puede almacenar o directamente se puede borrar", subraya, al tiempo que aclara que la protección de datos está garantizada.

También se puede utilizar este dispositivo en, por ejemplo, festivales. "Tú despliegas las cámaras y las recoges rápidamente. Así que el coste es bajo, la detección es rápida y enseguida puedes estar haciendo otro despliegue". En caso de atentados o atracos, continúa, "una vez que alguien se pone a disparar, la gente llama por teléfono a urgencias, emergencias, le da sus datos, registra la llamada, mientras con este sistema la alarma se notifica automáticamente a los servicios de emergencia para que puedan actuar desde el primer segundo".

El sistema, además, está ya disponible para su transferencia a empresas o servicios y fuerzas de seguridad. 

Por su parte, José Manuel Palomares, doctor en Informática y profesor titular de Ingeniería Electrónica y de Computadores de la Universidad de Córdoba, también ha participado en el proyecto y subraya que lo que han hecho es "demostrar el funcionamiento teórico de lo que hemos desarrollado con un ejemplo muy visual ".

En esta línea, anota, que el proyecto "es muy útil para la sociedad", al tiempo que indica que el sistema podría adaptarse de forma sencilla a otras necesidades

stats