Es bastante temprano para tratarse de un día festivo, pero los más pequeños se han levantado pronto de la cama. Nerviosos, han corrido hacia el salón con cuidado, no vayan a lamentar las prisas y a espantar a quien no deben. Al asomarse, ha saltado la sorpresa y ha estallado la alegría. ¡Este año también han venido!

Papel de regalo por todas partes, gritos de impresión y de ganas, y los vasos de leche y los mantecados por la mitad, aunque algunos camellos ni los han probado porque este año igual tenían más prisa. Bicicletas, balones, tablets, muñecos, juegos de mesa, ropa, algún carbón del dulce que otro para aquellos que no se han portado tan bien como debieran y una gran cantidad de juguetes para los niños más buenos. Por fin ha llegado el día más esperado del año.

"No podían ni dormir de los nervios", ha comentado Victoria González, quien junto a su marido Antonio Jesús García han pasado una agradable mañana en la plaza Periodista Matías Prats, en el barrio de Poniente. Con sus tres hijos, los mellizos Pablo y Ana, de 2años, y Alejandro, el mayor, no han dudado en salir a disfrutar desde primera hora de las sorpresas que les han traído este año los Reyes: tres bicicletas, una para cada uno; juguetes, una locomotora... Y es que, como aseguran los padres, "se han portado bien, aunque siempre se puede mejorar".

Estos tres pequeños se han levantado a las 09:00 para abrir con ansias sus regalos, aunque llevaban "dos meses de nervios", como ha bromeado entre risas Antonio Jesús.

Incluso más temprano se han despertado en la casa de Paco y Pepa, porque, pese a que este 6 de enero es un día festivo, las ganas y la ilusión de sus hijos les han obligado a estar en pie a las 07:00 para desenvolver las sorpresas que Melchor, Gaspar y Baltasar habían dejado bajo el árbol. "Les ha hecho muy ilusión, están encantados desde ayer que fuimos a ver la cabalgata", ha destacado Pepa.

Antonio Jesús y Victoria preparan las bicicletas de sus hijos.

Junto a esta pareja, sus amigos María y Pedro tampoco han desaprovechado la oportunidad de salir con sus hijos a que disfruten de los regalos de Reyes. Se han juntado en la plaza del Zoco y han hecho recuento de los regalos que Lucas, Lola, María y Pedro han recibido en esta fecha tan especial. Un muñeco Furby, el carnet de socio del Córdoba CF con la primera equipación incluida, un Scalextric de Cars, una muñeca de la Sirenita, manualidades para colorear y muchas otras sorpresas que tenían a los niños "sin dormir toda la noche", como comenta María.

Otras como Laura han recibido de parte de Sus Majestades un regalo que llevaban esperando mucho tiempo y que eran todo un deseo: unos patines. Ayudada por sus padres, Miguel y Lola, ha dado sus primeras vueltas sobre sus nuevos patines rosas equipada con casco y rodilleras a juego. Mientras tanto, su hermano giraba como un loco su Bley Bley sobre el soleado suelo de granito. "Han sacado muy buenas notas y se han portado muy bien", aseguran los padres de ambos, que agradecen también "el buen tiempo" que les ha permitido disfrutar de un ilusionante Día de Reyes.

Coches teledirigidos, bicicletas, patinetes, balones, cochecitos, muñecos y un sinfín de regalos de todos los tipos y colores se han visto por las diferentes calles de Córdoba acompañados de la mayor de la sonrisa de pequeños y mayores. Ha resultado inevitable no estrenar los regalos en el mismo 6 de enero, porque la ilusión ha sido máxima.

En casa de Miguel Ángel, sus tres hijos se han levantado a las 08:00 "muy nerviosos". A Ainara, de 13 años, le han traído una bicicleta y ropa; a Ángela, de 9, un juego de química, un microscopio y acuarelas; mientras que al pequeño, Arturo, que ha sido el encargado de despertar a todos para abrir las sorpresas más esperadas, los Reyes le han sorprendido con unos trenes de madera, un dinosaurio de juguete y una bicicleta.

Arturo, Ainara y Ángela disfrutan de sus regalos de Reyes dando un paseo.

Embalados sobre sus nuevos vehículos han salido al parque de al lado de su casa a vivir al máximo la ilusión de esta Navidad que llega a su fin. Se han visto enormes caras de alegría, como la de Clara Bustamante, de 15 años, que no ha dudado ni un segundo en salir a la calle a estrenar su jersey nuevo y su bolso acompañada de sus padres Rafa y Susi, que también han pillado algunas sorpresas de estos Reyes tan mágicos. Y es que, en un nuevo año lleno de esperanza con muchos retos y objetivos por cumplir, la clave está en estos "momentos de felicidad" que, como bien sostiene Rafa, "son los que te dan la vida".