Miriam Reyes y Alejandro López Andrada, a dos voces en Cosmopoética: "La poesía es más necesaria que nunca"

Literatura

La reciente Premio Nacional de Poesía y el autor de Los Pedroches coinciden en la importancia de que los autores profundicen en la parcela de su existencia

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Miriam Reyes y Alejandro López Andrada, en Cosmopoética.
Miriam Reyes y Alejandro López Andrada, en Cosmopoética. / Juan Ayala

Miriam Reyes (Ourense, 1974), reciente Premio Nacional de Poesía, y Alejandro López Andrada (Villanueva del Duque, 1957) han defendido este martes en Cosmopoética la vigencia de la poesía, que "está más viva que nunca y es más necesaria que nunca". "La gente joven escribe muchísima poesía en todos los medios, y en las redes hay mucha poesía. Hay colecciones como las que editan Cántico y La Bella Varsovia de gente muy joven y muy diversa", ha defendido el autor de Los Pedroches durante el coloquio, que ha estado moderado por el periodista pozoalbense Francisco Javier Domínguez.

Pese a esta situación tan prolífica, que permea géneros como el hip hop o el spoken word, pervive un sentimiento de negatividad, como ha lamentado Miriam Reyes. "Ese discurso catastrofista sobre lo mal que está la poesía existe desde que existe la poesía por su tipo de lenguaje y por su tipo de discurso, que en cierta manera siempre es marginal porque nos lleva a lugares que no son a los que estamos acostumbrados", ha reflexionado la autora. Así, "siempre acaba manteniéndose al margen, como un territorio desafiante y libre. Estos catastrofismos son recurrentes, como los generacionales. Hay inscripciones en la antigua Grecia que dicen lo mismo que ahora unos señores en la calle o en la cola del supermercado", ha comparado.

Reyes y López Andrada han protagonizado la sesión A dos voces, y se han congratulado por que los temas que se abordan en el festival cordobés son muy abiertos: "No solamente se habla de poesía, sino que hay muchas más vertientes y muchos caminos que se van entrecruzando. Es el concepto de puzzle, de retrato poliédrico, donde al final todo encaja en la poesía, pero deriva hacia otros campos", ha valorado López Andrada.

Meter el mundo dentro de ti y analizarlo

Los escritores, además, han profundizado en su manera de crear. En este sentido, López Andrada ha explicado que entiende la poesía "como una interiorización, como meter el mundo dentro de ti y analizarlo". "Lo importante para un poeta es buscar su propia identidad, su raíz, y no me refiero a la raíz telúrica o de la tierra, sino a tu propio yo. Y huir de la moda". Ha recordado que, cuando él empezó a escribir en la década de los ochenta, lo "trataban con desprecio" porque lo consideraban un "poeta rural", que habla de la naturaleza. "Me decían que era un cateto y llegaron a preguntarme que por qué no escribía de la ciudad. Y ahora, curiosamente, se ha puesto de moda lo rural, sobre lo que yo escribí hace 30 años una trilogía", ha abundado.

Miriam Reyes, por su parte, ha parafraseado a Maria Mercè Marçal, quien solía decir que la labor del poeta es desbrozar la parcela de existencia que le había tocado vivir "para que por allí pudieran pasar otras personas". "Me gusta mucho esa imagen y de eso se trata, de desbrozar esa parcela de existencia pero a fondo, bien. Hay que preparar esa tierra y hacerla realmente transitable", ha incidido.

La Premio Nacional de Poesía ha reivindicado también el papel de la mujer en la literatura: "No quiero hablar de la escritura de mujeres porque no hay tal cosa, sino mujeres que escriben. Y a las mujeres que escriben no se las leía hace 40 años, no se las tomaba en cuenta, y por eso ahora hay esa gran sorpresa, como si hubiéramos brotado como champiñones", ha ironizado. López Andrada, en este sentido, ha reivindicado a Juana Castro, que "hace 40 fue una pionera, una valiente que se echó hacia adelante y sacó libros muy buenos".

Miriam Reyes nació en Ourense y a los 8 años emigró con sus padres a Caracas. Es licenciada en Filología Hispánica. En 2001 publicó Espejo negro (DVD). Con su segundo poemario, Bella durmiente, fue finalista del Premio Hiperión (2004). Después siguieron los títulos Desalojos (Hiperión, 2008), Haz lo que te digo (Bartleby, 2015), Prensado en frío (Malasangre, 2016) y Sardiña (Chan da pólvora, 2018), todos ellos reunidos en el volumen Extraña manera de estar viva (Mixtura, 2022). Su más reciente título, Con (La Bella Varsovia, 2024), ha recibido el Premio Nacional de Poesía 2025. Su obra ha sido recogida en numerosas antologías nacionales e internacionales y ha sido traducida a más de media docena de lenguas. Asimismo, ha traducido al castellano a poetas en lengua gallega, catalana y portuguesa. Desde el año 2001 experimenta con la escritura audiovisual y el recital multimedia. Ha presentado sus video-recitales en festivales de poesía, spoken word y artes escénicas.

Alejandro López Andrada (Villanueva del Duque, 1957) comenzó a escribir muy joven y, hasta el momento, ha dado a la luz poemarios como El Valle de los Tristes (1985), El rumor de los chopos (1996) o Los ángulos del cielo (2014); ha recibido premios como el Rafael Alberti, José Hierro, Ciudad de Salamanca y el Andalucía de la Crítica. Su libro La tierra en sombra fue Premio Fray Luis de León y con Las voces derrotadas obtuvo el Ciudad de Córdoba, Ricardo Molina. Su antología poética El horizonte hundido, con prólogo y selección de Antonio Colinas, vio la luz el año 2017. Posteriormente ha publicado Parte de ausencias (2022), Va oscureciendo (2023), con el que obtuvo el Premio Internacional Claudio Rodríguez, y La huella azul (2025). Por otro lado, ha publicado dos títulos de poesía infantil y doce novelas, una de ellas, El libro de las aguas (2007), fue adaptada al cine por Antonio Giménez-Rico, y con Los perros de la eternidad (2016) obtuvo el Premio Jaén de Novela. Su novela más reciente es El corazón de las golondrinas (2025).

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