Unos 2.500 médicos de Córdoba están llamados a cuatro días de huelga del 9 al 12 de diciembre

Unos 2.500 médicos de la sanidad pública cordobesa (incluidos los médicos internos residentes, MIR) están llamados a una huelga de cuatro días de duración que se llevará a cabo la próxima semana, 9 al 12 de diciembre. Este paro de carácter nacional está convocado por la Confederación Española de Sindicatos Médicos (CESM) y secundado por el Sindicato Médico Andaluz (SMA) en defensa de la profesión y de la sostenibilidad del sistema sanitario público.

Después de los dos paros nacionales del pasado 13 de junio y 3 de octubre, estas nuevas movilizaciones se plantean como rechazo unánime de la profesión al borrador de Estatuto Marco que pretende aprobar el Ministerio de Sanidad y ante la falta de una respuesta institucional adecuada durante las negociaciones.

Estas acciones fueron acordadas por ambas organizaciones a mediados del pasado mes de octubre después de haber enviado una nueva carta a la ministra de Sanidad, Mónica García, en la que le reclamaban una reunión efectiva y directa que permita avanzar en una posible solución consensuada al conflicto ante los escasos avances que se había producido en los últimos meses y la falta de compromiso por parte de los representantes ministeriales.

Los sindicatos consideran que estos son los responsables únicos de esta escalada en las movilizaciones por su negativa a elaborar un estatuto propio del médico y la ausencia de un marco de negociación diferenciado, siendo España uno de los únicos tres países que no disponen de ello.

Servicios mínimos y atención a pacientes frágiles

Desde el Sindicato Médico de Córdoba señalan que, "como siempre, este paro se realiza con absoluto respeto a los estándares éticos de la profesión médica". Esto significa que durante toda la huelga se garantizara la atención a urgencias y emergencias, la asistencia a pacientes oncológicos, la continuidad de tratamientos no demorables y la atención a pacientes frágiles, como los usuarios en programas de diálisis. "Nuestra huelga protege la seguridad del paciente", resaltan.

La organización sindical es consciente de que "pueden producirse molestias para algunos usuarios de la sanidad pública" y, por ello, pide "disculpas", pero también reclama "comprensión" porque "lo que está en juego no es solo el futuro de nuestra profesión, sino la calidad de la atención que reciben los pacientes".

"Los médicos queremos poder ejercer con dignidad, con tiempo y con recursos. Queremos poder atender sin enfermar en el trabajo, incluso -si se permite la expresión- sin morir en el intento porque hoy, en España, muchos médicos están desarrollando problemas graves de la esfera de la salud mental y del síndrome de burnout", aseveran desde el Sindicato Médico de Córdoba.

Incluso algunos "se ven obligados a abandonar la sanidad pública o incluso la profesión. De ello, se han daco varios casos en la provincia de Córdoba, según el sindicato. "El deterioro del sistema sanitario es evidente: afecta a los profesionales, pero también a los pacientes", agrega.

La necesidad de un estatuto propio

Esta huelga se enmarca en el contexto de la actual reforma del Estatuto Marco promovida por el Ministerio de Sanidad, un texto que regula las condiciones laborales de los profesionales sanitarios y que posteriormente adaptan las comunidades autónomas.

Los médicos reclaman un estatuto propio, específico para facultativos, que contemple "la altísima responsabilidad que asumimos, la técnica y complejidad de nuestra labor clínica y la necesidad de condiciones adecuadas que permitan retener talento y evitar el éxodo de profesionales", indican desde el sindicato.

En esa línea, añaden que "ningún otro colectivo del Sistema Nacional de Salud asume el nivel de responsabilidad, carga asistencial y consecuencias legales que soporta el médico", por lo que "s hora de que esto se refleje en una normativa adecuada".

Desde la organización sindical aclaran que han llegado a este punto "tras años de pasividad y maltrato institucional, tanto por parte de gobiernos nacionales como autonómicos de uno y otro signo político". "La precariedad y la sobrecarga no entienden de izquierdas ni de derechas; nos afectan a todos por igual y ponen en peligro la continuidad del sistema sanitario público", manifiestan.

Por último, animan a los médicos cordobeses a sumarse a esta huelga por responsabilidad: "por nuestra profesión, por nuestros pacientes y por la sanidad pública que queremos dejar a las próximas generaciones".