Plan de Córdoba contra el ruido: impulso a la movilidad en bicicleta y límites sonoros al ocio

El Plan de Acción contra el Ruido derivado de la cuarta fase del Mapa Estratégico de Ruido de la ciudad elaborado por el Ayuntamiento de Córdoba propone medidas para "fomentar la movilidad activa saludable en bicicleta; así como aumentar la dotación de carriles bici y aparcabicis". Asimismo, también propone medidas para "fomentar los desplazamientos a pie a través de una red de itinerarios accesibles".

Se trata de dos las 38 acciones contempladas en el documento repartidas en cuatro líneas estratégicas, tal y como ha relatado el edil de Medio Ambiente, Daniel García-Ibarrola. Este plan, el cuatro ya, tiene una vigencia de cinco acciones con acciones a desarrollar a corto, medio y largo plazo, como también ha referido García-Ibarrola.

Esas dos acciones están incluidas en la línea estratégica Movilidad urbana, al igual que lo están medidas para incentivar el uso y mejorar la oferta de transporte colectivo; la ordenación de la carga y descarga en la ciudad; un plan de aparcamientos disuasorios; medidas de calmado de tráfico; y medios disuasorios sobre la velocidad de circulación en vías urbanas por el municipio mediante mecanismos de control. También, el mantenimiento de pavimentos e instalación de pavimentos fonoabsorbentes que permitan reducir el nivel sonoro respecto a pavimentos convencionales; la reordenación del tráfico rodado; y la creación de infraestructuras de recargas de vehículos eléctricos.

La segunda línea estratégica es Infraestructuras, urbanismo y ordenación del territorio. Esta línea contempla acciones como instar a las administraciones titulares de las grandes infraestructuras viarias y ferroviarias que afectan a la ciudad de Córdoba a la reducción de su impacto acústico sobre la misma; y la consideración de la variable acústica en el diseño de la sección transversal de las vías, así como en la planta y perfil longitudinal de las mismas.

También, la gestión para la instalación de pantallas acústicas en ejes viarios o ferroviarios; la consideración de la variable acústica en los instrumentos de planeamiento urbanístico del municipio; la ordenación estratégica de usos del suelo; evitar el modelo de ciudad difuso, dando prioridad al desarrollo urbanístico compacto en las urbanizaciones futuras y el desarrollo del casco urbano; y actuaciones para la selección de las zonas tranquilas urbanas potenciales.

La tercera línea estratégica es Divulgación, sensibilización y educación. Esta línea incluye, entre otras acciones, medidas para incentivar la participación y sensibilización de la ciudadanía a través de su implicación en actividades sobre el ruido; campañas de concienciación ciudadana para una movilidad sostenible; una campaña de sensibilización en centros docentes del municipio.

También una campaña de sensibilización al ruido en zonas de ocio derivados de locales de ocio y terrazas; promover la colaboración y sensibilización de los principales agentes implicados en la generación del ruido; y potenciar la formación de la Policía Local y de los técnicos municipales en materia de ruidos.

Límites en el ocio

La cuarta línea estratégica es Ocio, actividades y servicios. Esta línea incluye acciones como un inventariado de las zonas que presentan contaminación acústica por ocio nocturno; la gestión de zonas de ocio (campañas de medición y visualización de ruido mediante monitorización de ruido ambiental en terrazas y zonas de concentración de personas); medidas restrictivas sobre actuaciones de ocio; y la incorporación de limitaciones al ruido en los eventos organizados por el Ayuntamiento.

También, incluir la variable acústica en la compra y contratación de equipamiento y servicios municipales, de forma que se prioricen los menos ruidosos (vehículos, herramientas, instalaciones, etcétera) en zonas más susceptibles a las molestias de la ciudadanía; el establecimiento de criterios acústicos puntuables en licitaciones de obras públicas y edificaciones de promoción municipal; medidas para la gestión de servicios de limpieza viaria, jardinería y RSU; y el control en el cumplimiento de horarios de obras.

Asimismo, en esta línea se contempla la renovación del parque municipal de vehículos; la aplicación de bonificaciones en el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) para vehículos menos contaminantes acústicamente; y la aplicación de beneficios económicos y subvenciones para la ejecución de medidas de aislamiento en viviendas especialmente afectadas.

"Se trata del cuarto plan contra el ruido elaborado por el Ayuntamiento y con vigencia, como los demás, de cinco años. Tras este cuarto plan, que tiene vigencia hasta 2030, vendrá el quinto. Muchas de esas actuaciones que contempla el plan ya las hemos puesto en marcha; porque hablamos de fomentar la concienciación del uso del transporte público, fomentar también el traslado a pie, hablamos también de fomentar los puntos de recarga eléctrica, también de fomentar ese cambio de flota en las empresas municipales, que ya se ha hecho en gran medida y en gran porcentaje, en el caso de Aucorsa", ha defendido García-Ibarrola.