El Zoológico de Córdoba tiene un nuevo inquilino. Se trata de Porthos, un leopardo de Sri Lanka de diez años y más de 70 kilos de peso. Esta especie se encuentra en peligro de extinción, ya que solo quedan alrededor de 750 ejemplares de su especie en todo el mundo, por lo que forma parte del Programa de Conservación y Preservación. Este ejemplar es el primer leopardo que habita el Zoo cordobés.

El delegado de Medio Ambiente, David Dorado, ha explicado que Porthos "proviene de un zoológico de Francia y de Alemania anteriormente", lo que ha declarado que demuestra la calidad de las instalaciones del recinto, que ha calificado de "garantistas y seguras". Además, ha asegurado que "nunca ha sido de captura" y que su futuro pasa por la adaptación y participar "en la cría y sostenimiento de su especie".

El director del Zoológico de Córdoba, Antonio Torrecilla, por su parte, ha apuntado que Porthos "está en la fase adulta y maduro para la reproducción", por lo que podrían unirlo con una hembra si las valoraciones sobre su adaptación son positivas.

Porthos llegó al zoo de la capital el pasado verano y, desde entonces, "se ha aclimatado" poco a poco junto a sus cuidadores y el veterinario al nuevo entorno y está "más adaptado al exterior", ha indicado. En el interior tiene su zona de seguridad, de la que él mismo ha ido saliendo según su confianza.

Las instalaciones en las que se encuentra han sido mejoradas para evitar riesgos. El anterior inquilino era un jaguar que murió por causas naturales, y los trabajadores del zoo han tenido que "tomar medidas perimetrales" debido a que su potencia de salto alcanza los cinco metros, así como bloquear las subidas por los árboles. 

De momento, todo parece indicar que el animal está haciédose amigo del terreno correctamente, a pesar de que el espacio se antoja pequeño para su imponente envergadura. En su hábitat natural, Porthos sería el depredador dominante.

No obstante, y como ha recordado Dorado durante su intervención, se trata de una especie muy perseguida en Sri Lanka, especialmente debido a la caza furtiva. Por ello, es importante el buen funcionamiento de los Programas de Protección y Prevención.

Si todo sale bien, las futuras crías de Porthos podrían ser reintroducidas en su entorno. La gestación de esta especie dura entre 90 y 175 días y pueden llegar a tener hasta cuatro cachorros.

De momento, el leopardo recorre los límites de su nuevo lugar y a las nuevas condiciones en las que vivirá. Desde el Zoo han matizado que la temperatura favorece su comodidad, aunque le faltan más lugares con agua (el recinto tiene dos fuentes grandes y una piscina en el interior). En Sri Lanka, ocupa las selvas tropicales, los bosques húmedos y las zonas áridas de matorral, espacios que han tratado de reproducir.

Porthos, en su recinto.