¿Por qué es importante elegir una buena clínica de fisioterapia?
Contenido externo
La prevención es, en muchas ocasiones, una manera de evitar males mayores, sobre todo cuando nos referimos a temas de salud. El día que decidimos ir a una clínica de fisioterapia suele ser porque hemos experimentado alguna molestia o dolor que nos impida desarrollar nuestra vida con normalidad. Las molestias en la espalda por soportar cargas pesadas, los dolores de cuello a causa de las intensas jornadas laborales o la práctica de ejercicio físico suelen ser las principales causas que nos lleven a ponernos en manos en profesionales.
Como es lógico, resulta esencial acertar con el mejor fisioterapeuta, ya que al final lo que está en juego es nuestro estado. Confía en aquellos que acrediten una amplia experiencia y que cuenten con la suficiente formación. De lo contrario corremos el riesgo de seguir con molestias o incluso de agravarlas.
¿En qué ocasiones debo acudir al fisioterapeuta?
La tendencia del paciente es a acudir a la clínica del fisioterapeuta cuando la molestia se ha agravado y no encontramos otro remedio. Sin embargo, lo adecuado sería ponerse en manos del profesional en el mismo instante en el que se produce la lesión o aparece el dolor, ya que esto aumentará las posibilidades de recuperación.
En muchos casos, esas lesiones avanzan con el tiempo y llegan a adquirir una cierta gravedad si no se han tratado a tiempo. De ser sí, lo que conseguiríamos sería incrementar los plazos de recuperación.
Hay una serie de situaciones que invitan al paciente a ir al fisioterapeuta. En el caso de que en el pasado haya experimentado algún tipo de molestia o lesión muscular, las visitas regulares servirán a modo de prevención para que no se vuelvan a reproducir.
Además de ejecutar un trabajo preventivo, también le aportará una guía con las actividades que podrá llevar a cabo según su situación física en ese momento.
Los deportistas que se ejercitan a un cierto nivel de intensidad son más propensos a sufrir lesiones. El paso por el fisioterapeuta le ayudará a descargar los músculos en el caso de que sufra contracturas o sobrecargas, además de recomendarle ejercicios para fortalecer las zonas más sensibles a lesionarse. No hay que esperar nunca a caer lesionado, ya que de ser así, posiblemente tengamos que permanecer unos cuantos días en el dique seco.
Pero no hace falta practicar ejercicio para experimentar dolores o lesiones. Son muy habituales, también, los problemas derivados de una mala postura corporal. Pasar mucho tiempo delante del ordenador, sentarse mal o realizar una tarea en una posición poco natural puede acabar pasándonos factura. Un profesional de la fisioterapia se encargará, entre otras cosas, de proponernos una serie de ejercicios para combatir este contratiempo.
Hay que decir que el fisioterapeuta trabaja de manera coordinada con otros profesionales del ámbito de la salud. Así que si aprecia algún tipo de anomalía o patología podrá derivarte a ellos para que puedan tratarte convenientemente.
¿Qué lesiones trata el fisioterapeuta?
El fisioterapeuta trata un amplio número de lesiones, muchas de ellas derivadas por la práctica deportiva, un sobreesfuerzo, vida sedentaria o una mala postura corporal. Entre las patologías más comunes se encuentran:
- Lesiones traumatológicas: afectan al sistema locomotor y se pueden originar por distintos motivos. Entre las más frecuentes hay que destacar las cervicalgias, dorsalgias, luxaciones, lumbalgias y tendinitis.
- Lesiones deportivas: se tratan de las alteraciones que se producen a consecuencia de un ejercicio físico o la práctica de un deporte. La mayoría de los pacientes que llegan a la consulta del fisioterapeuta son por desgarros de músculos o tendones, esguinces o torceduras en tobillos, fracturas, sobrecargas y dislocaciones.
- Lesiones reumáticas: más que lesiones se pueden considerar enfermedades que afectan sobre todo al aparato locomotor y tejido cognitivo. Entre las más habituales destacan la artrosis, artritis reumatoide y fibromialgia.
Mejores clínicas de fisioterapia en Córdoba
Ante cualquier lesión, siempre hay que tomar decisiones de manera inmediata. Pero las prisas no deben conducirnos a elegir la primera clínica que encontremos. Comprueba que los profesionales de la misma estén colegiados y dispongan de la suficiente experiencia para tratar todo tipo de dolencias.
Para empezar con el proceso de fisioterapia es preciso que realicen una valoración inicial con el ánimo de detectar el problema y analizar la manera de tratarlo. Eso requiere también disponer de unas instalaciones y una maquinaria adecuada.
En Córdoba encontramos muchas clínicas especializadas en fisioterapia, y que cumplen con todos estos requisitos que son esenciales para conseguir una pronta recuperación. Entre ellas se podría destacar a Clínicas Arias de fisioterapia, que se encargan de realizar un trabajo personalizado y avanzado.
No hay comentarios