María Van den Eynde: "El festival Flora no se entendería sin celebrarlo en Córdoba"

El Festival Internacional de las Flores de Córdoba -Flora- regresa en su octava edición, que se celebra del 13 al 23 de octubre en cinco patios de edificios históricos de la capital (el Palacio de la Merced, el Palacio de Viana, el Palacio de Orive, el Museo Arqueológico y el Patio de los Naranjos de la Mezquita-Catedral). Una cita que ya es fija en el otoño del calendario cordobés y cuyo reconocimiento mundial es cada año mayor. Ese orgullo no lo puede contener en su entrevista con El Día la directora general del festival, María Van den Eynde (Madrid, 1975), que se enamoró de la ciudad nada más conocerla en 2017. Por Córdoba y la cultura, María trabaja durante meses junto a su equipo para que Flora se supere en cada edición trayendo a artistas que vienen desde muy lejos y sorprendiendo a visitantes locales, nacionales y de todo el mundo.

Pregunta.¿Es ya Córdoba, con Flora, esa capital internacional del arte floral que buscaba Zizai cuando en 2017 celebró la primera edición del festival?

Respuesta.Sí, sin duda. No ya es que lo digamos nosotros, sino que lo podemos comprobar a través de los dos trabajos que hacen las dos universidades aquí de Córdoba, la Universidad Loyola, que habla del impacto económico de Flora en la provincia (46,9 millones de euros y 68 empleos generados), y la Universidad de Córdoba, que habla del perfil del visitante y de la percepción del festival entre los visitantes. Casi el 90% de los visitantes que vienen a Flora confirman que nunca han estado en un festival como este que celebramos en Córdoba.

P.¿Y Córdoba es consciente de la repercusión económica que tiene Flora para la propia ciudad?

R.Yo creo que sí que lo es, lo empieza a ser. Este es un proyecto raro desde su inicio, porque no es habitual, no es normal, que una empresa privada decida generar un proyecto cultural para una ciudad a nivel gratuito, que es lo que hizo Zizai en 2017. Yo creo que, poco a poco, esta quimera que se inventó Zizai en ese momento, toda la ciudad, empezando por las instituciones, se ha ido dando cuenta de lo importante que puede ser para la Córdoba y del poder transformador que tiene.

"Córdoba se ha ido dando cuenta de lo importante que puede ser para la ciudad esta quimera que se inventó Zizai en 2017 y del poder transformador que tiene para la misma"

P.¿Cómo ha evolucionado Flora en todos estos años?

R.Flora surgió realmente como una especie de experimento, como una apuesta de una empresa privada, de Zizai, que decide regalarle a la ciudad un festival sobre arte floral contemporáneo. Ese experimento estaba pensado específicamente para Córdoba, porque en Córdoba estamos muy acostumbrados a eso que se dice aquí, que es salir a ver patios. Y la ciudad, en estas ocho ediciones, ha hecho suyo el festival. Es una pieza más de los festejos que hay a lo largo del año en Córdoba y, desde luego, es la pieza indiscutible del otoño cordobés.

P.Una pieza indiscutible del otoño cordobés. ¿Por qué se eligió esta estación del año para su celebración?

R.Cuando Zizai empezó a hablar con el Ayuntamiento sobre la puesta en marcha de esta quimera, que ahora mismo es una realidad, una de las cuestiones que se les planteó es dónde querían que en el calendario se ubicara el festival. Una de las razones que dio el Ayuntamiento para celebrarlo en otoño es que era una época en la que no había prácticamente turismo en Córdoba. Ahora, con Flora, el otoño cordobés está al mismo nivel que el mayo. Creo que el año pasado estaba incluso un poquito por encima. Eso por un lado, y, por otro lado, pues obviamente mayo en Córdoba es el mes de los patios, y el otoño nos parece, por climatología y por luz, una buena época para venir a visitar Córdoba y visitar los patios de Flora.

P.Flora innova cada edición. ¿Qué innovación destacaría de la edición de este año, cuáles son sus novedades más importantes?

R.Efectivamente, todos los años intentamos innovar, quizás nosotros lo vemos más como correcciones, como maneras de poder hacerlo mejor al año siguiente, de ir incorporando nuevas facetas al festival. Llevamos varios años trabajando en lo que nosotros llamamos el Programa OFF, que son actividades que hace la ciudad por su cuenta y que quiere incluir dentro la programación de actividades del festival. Este año a los OFF les hemos tirado el guante y les hemos ofrecido una ayuda que de momento ha sido pequeña, pero que esperamos poder aumentar para ediciones futuras para que programen actividades.

P.Esta edición Flora se celebra bajo el lema 'Futuro'

R.Nosotros siempre buscamos temáticas que de alguna manera estén muy vinculadas al momento que se vive y desde luego se está hablando ahora muchísimo del futuro. Es cierto que muchos de los inputs que tenemos sobre el futuro son bastante desalentadores y nosotros, sin embargo, lo que queríamos es darle la vuelta a eso y hablar de que hay un futuro mejor, hay un futuro posible y que tenemos que fijarnos en la naturaleza y en el medioambiente para ser mejores.

P.Si, porque lo que se ha dejado claro edición tras edición es que Flora es más que un festival de arte floral, también es una cita que ejerce una labor de concienciación social, ¿verdad?

R.Sí, la coletilla del festival es Arte Floral y Botánica Contemporánea, pero es verdad que lo que queremos, uno de los objetivos que tiene el festival, es generar masa crítica en la gente. Nuestras instalaciones son el escaparate para que venga todo ese turismo que conseguimos movilizar cada año, pero buscamos a través del programa de actividades paralelas contenidos de enjundia que realmente hagan a la gente reflexionar y que les sirvan más allá de los días que nosotros estamos aquí celebrando el festival. Buscamos con ello que surjan iniciativas en la propia ciudad.

P.¿Creen que cala esa concienciación que promulgan con el festival?

R.Nuestro espíritu está muy vinculado al concepto de sostenibilidad, pero entendido de una manera, bueno, de 360 grados, como se dice. No solamente con la preocupación por el medioambiente o por la naturaleza que hay a nuestro alrededor, sino por poner en valor lo que tenemos cerca, lo local, los proveedores locales, el talento local. Y trabajamos siempre desde ese punto de vista. Por otro lado, creemos que es importante que nosotros seamos capaces de poner nuestro pequeño granito de arena para que la ciudad sea mejor, por eso hacemos un trabajo con varias asociaciones de jóvenes en riesgo de exclusión, a los que les enseñamos cómo se hace esto de las instalaciones florales artísticas contemporáneas. Y luego, tenemos un chascarrillo interno, chascarrillo que ya lo he contado mil veces, que es que en Flora somos como una madre, que no se tira nada.

"En España no hay mucha cultura del patrocinio cultural; y nos cuesta conseguirlo para Flora”

P.¿Qué quiere decir?

R.Que una vez que terminan las exhibiciones florales, con todo ese material se vuelven a hacer instalaciones efímeras con estos colectivos de personas en riesgo de exclusión, que además este año las haremos en el Palacio de Orive. Y una vez que eso ha terminado, invitamos a que la gente se lleve lo que quiera del material de Flora, porque ya le digo que es que intentamos no tirar nada. En el caso de alguna estructura o alguna cosa un poco más grande, siempre buscamos asociaciones o centros de estudio que lo puedan necesitar como la Escuela de Teatro o el Centro Sociocultural Luciana Centeno, que muchas veces se queda con cosas que han sido de Flora.

P.A la hora de escoger a los artistas que participan, ¿qué se tiene en cuenta?

R.Los artistas los seleccionamos con un año de antelación. De hecho ahora se está preparando la selección del próximo año. Es un trabajo que hace Emilio Ruiz Mateo, que es el director artístico del festival. Lo que tenemos en cuenta es que sean artistas de reconocido prestigio, artistas internacionales, porque Flora es un festival de carácter eminentemente internacional; y luego sí que buscamos que tengan ese punto de artistas contemporáneos. Hay grandísimos decoradores florales a lo largo y ancho del mundo que hacen unos trabajos maravillosos, pero nosotros buscamos otra cosa, porque realmente nuestra manera de aproximarnos a lo botánico es a través de artistas que utilizan lo vegetal como material de creación.

P.¿Y qué se tiene en cuenta a la hora de repartir los patios a los artistas para que monten sus instalaciones florales?

R.Eso lo hacemos cuando ya tenemos el plantel de artistas seleccionados. Lo vamos haciendo también en función del carácter de cada artista o del tipo de trabajo que haga cada artista, cómo puede funcionar en un patio más grande determinado artista o en un patio más blanco determinado artista.

P.Recuerde quienes son los artistas de este año

R.Tenemos cuatro grandísimos artistas florales internacionales y un artista Nobel. Empezando en la Diputación, en el Patio del Reloj, tenemos a la Musa de las Flores, Gabriela Salazar, que es una artista mexicana. Pasamos al Palacio de Viana, allí está Wagner Kreusch, que también es brasileño. En el Palacio de Orive está Patio Talento, que es la convocatoria para artistas nóveles, con Ikefrana, que es una artista de Ciudad Real. En el Museo Arqueológico, que vuelve a incorporarse este año a Flora, está la artista española Paula Anta. Y por último, en el Patio de los Naranjos de la Mezquita Catedral está Michael Putnam, que es artista americano, estadounidense.

P.Por lo que ya tienen de experiencia, ¿qué significa para los artistas participar en Flora?

R.Bueno, lo primero es que descubren Flora. Por desgracia, la mayoría de ellos antes de venir a Flora no habían estado nunca en Córdoba y para un artista floral descubrir una ciudad como Córdoba con todo ese patrimonio y tradición que hay en torno a lo vegetal y a las flores, como te puedes imaginar, pues se quedan absolutamente anonadados con la ciudad. Lo segundo es que se les da la oportunidad de trabajar desde la libertad creativa y hacer una obra que sea puramente suya. Y lo tercero es que tienen la oportunidad de conocer a otros artistas de su talla, a los que probablemente admiran y de los que probablemente conocen su trabajo, pero con los que no han coincidido nunca. Entonces, lo que nos llega a nosotros es que realmente para los artistas hay un antes y un después de pasar por el certamen y muchos de ellos siguen viniendo todos los años de manera particular a visitar Flora, que es el único festival de arte floral contemporáneo que hay ahora mismo en el mundo y que está en Córdoba. Es el único proyecto que trabaja desde lo contemporáneo y lo vegetal.

P.¿Se entendería Flora sin Córdoba?

R.No, porque Flora, que es un festival, que es un proyecto que podría estar perfectamente, por el cariz internacional que tiene y los contenidos que trae, en cualquier gran capital mundial, tiene todo su sentido que suceda aquí, en Córdoba, con toda la cultura que hay en esta ciudad alrededor de la vida en el patio y todo el conocimiento botánico que hay entre los cordobeses. Flora surgió de manera muy concreta solo para Córdoba y está indisolublemente unida a la ciudad.

"Creemos importante poner nuestro granito de arena para que la ciudad sea mejor"

P.¿Cuesta mucho conseguir patrocinadores para eventos como Flora?

R.Sí, el patrocinio cultural, por desgracia, no es algo de lo que en España haya mucha cultura. Muchas marcas, muchas instituciones no entienden que el retorno de un patrocinio cultural, no es un retorno inmediato, como tener tu logotipo en una camiseta de un equipo de fútbol, sino que es un retorno más a medio-largo plazo y que, ni más ni menos, lo que hace es que puede transformar una sociedad. Y eso no es fácil de conseguir.

P.¿Qué ha supuesto para Flora abrirse a la provincia?

R.A ver, nosotros siempre lo hemos tenido en la cabeza, para nosotros no solo es Córdoba ciudad, sino que es toda la provincia, pero como somos un proyecto con un alcance muy limitado, entonces tenemos muchas cosas para hacer en un futuro mediano, o sea, a corto plazo y a medio y a largo plazo. La provincia era una de las cosas que siempre hemos estado trabajando con artistas y con proveedores, no solo de aquí, sino de toda la provincia, y es algo que teníamos superclaro que había que hacer. Y que si no lo hemos hecho antes y si vamos como vamos es porque somos un proyecto con recursos limitados.

P.Hablemos de las actividades paralelas de la edición de 2025

R.Tenemos un centenar. Para nosotros son muy importantes porque es lo que realmente pensamos que va a dejar más poso y más huella en la ciudad. Son actividades destinadas a casi todas las tipologías de público. Hay muchas actividades participativas, talleres. Este año incorporamos varias actividades específicamente infantiles, que era también una espinita que teníamos. Hay actividades que, por supuesto, van a hacer los artistas invitados al festival, que siempre les pedimos que hagan algo que se salga fuera de lo común. No queremos que vengan a dar una conferencia, queremos que hagan algo participativo con la gente de aquí, de la ciudad. Por supuesto, tenemos artes escénicas, vamos a tener música, está nuestro programa de visitas guiadas...

P.¿Puede destacar algunas?

R.Bueno, pues en cuanto a participación ciudadana y de calle, durante el fin de semana, aparte de la Velá de las Flores, que se desarrollará en el Paseo de la Victoria organizada por la Delegación de Juventud del Ayuntamiento, ADIS Meridianos va a crear el domingo por la mañana un mural en el solar del Antiguo Cine Andalucía. Alrededor de ese mural se van a hacer un montón de actividades callejeras, también con varias asociaciones y agrupaciones vecinales. En cuanto a participación ciudadana, esas dos actividades, como la Guerrilla de las Flores, me parecen muy interesantes. Tenemos un ciclo de conferencias sobre Jardines del Futuro de la mano de Antonio Díaz, que es un catedrático de la Universidad de Córdoba. Vamos a tener a Antonio Ruz el día 13 con Agro, un espectáculo increíble de baile en Caballerizas Reales; vamos a utilizar el espacio de una manera que no se había utilizado antes. Estará Isabel Do Diego el sábado 18 de octubre en el Conservatorio haciendo una performance sonora titulada Enflorecida... Es que hay de todo. Lo mejor es que todo el mundo se mire el programa porque hay actividades para todos los gustos.

P.¿Cree que Flora ha covencido a aquellos que piensan que el arte floral a este nivel es una cosa reservada a las élites de que estaban equivocados? Lo pregunto por la importancia de los artistas que vienen al festival, como fue el caso, por ejemplo, de Shane Connolly, florista de la Casa Real Británica

R. Quiero pensar que sí, porque desde luego nuestro enfoque no va por ahí. Lo que nosotros hacemos en Flora es acercar a los ciudadanos a estos artistas que muchas veces pueden ser casi figuras intocables, porque trabajan con gente hiper-mega famosa, mitos del mundo. Lo que hacemos también es pasear con ellos por la ciudad, llevarlos a conocer todo. Hay anécdotas de artistas que han acabado en el Jazz Bar haciendo una improvisación musical, u otros que han venido y que están buscando una casa para comprarse aquí en Córdoba. Es que hay mil anécdotas. Hay veces que esta gente, que la ves tan lejana, cuando la bajas y la mueves un poco por una ciudad tan mágica como Córdoba, y con gente tan amable como es la que vive en esta ciudad, pues alucina.