Cáritas atendió a casi 20.000 personas en Córdoba durante 2024

Córdoba/Cáritas Diocesana de Córdoba atendió en el 2024 en Córdoba a casi 20.000 personas. En total, fueron 19.478 las personas acompañadas y ayudadas por la entidad, principalmente en materia de alimentación (37,3%), de vivienda (28%) y de suministros básicos (21%). Una cifra que es positiva, pese a que ha supuesto una bajada de más de 2.000 personas con respecto al año 2023, cuando se atendieron a 22.661 personas, y muy significativa en comparación con las más de 30.000 atendidas en 2022.

Así lo ha anunciado el director de Cáritas Córdoba, Darío Reina, durante la presentación de la memoria completa del 2024, quien ha explicado que la institución ha atravesado "dificultades económicas" y un "desequilibrio presupuestario" causado por "la reducción de donaciones y subvenciones", así como "el incremento del gasto de programas por el coronavirus" desde finales de 2023. Ante esta situación, Cáritas Córdoba ha tenido que aplicar recortes "para garantizar la sostenibilidad económica" y una reducción de plantilla del 20% y del 13% en el presupuesto: 2,6 millones de euros, más de 400.000 euros menos que el año anterior (3,1 millones de euros).

La inversión final durante el 2024 fue de 3.244.533 euros con las ayudas extraordinarias de la Diócesis de Córdoba y del Cabildo. Gracias a esta partida presupuestaria han podido atender a casi 20.000 personas en Córdoba en diversas actividades. En atención primaria, Cáritas Diocesana ha atendido a 1.400 personas (más de 400.000 euros); en el programa de personas sin hogar, la ayuda la han recibido 1.070 personas acogidas desde los distintos recursos con 686.000 euros de presupuesto (408 en la UVI social); en el programa de mayores, 97 personas han sido acompañadas en las residencias San Pablo, Tejiendo Redes y en ayuda a domicilio (600.000 euros); y en el servicio de empleo e inserción laboral, 778 personas han sido acogidas (340.00 euros), 88 en cursos de formación y 169 contratados en Solmeccor u otras empresas.

Con respecto al perfil de las personas que fueron acompañadas durante el 2024 por Cáritas Córdoba, el 53,5% fueron hombres y el 46,5%, mujeres. La mayoría fueron de nacionalidad española, el 56%, mientras que el 44% restante, extranjera. La mayoría de estas personas tenían una edad comprendida entre los 36 y los 65 años (44%), mientras que de 18 a 35 años con el 27,2% y de cero a 17 años con el 23,2% son los rangos de edad que más se dieron. El 5,7% fueron mayores de 66 años.

La gran mayoría de los atendidos, el 40%, proceden de hogares de pareja con hijos, mientras que el 20,6% fueron de hogares monoparentales y el 19,4%, de unipersonales. Con respecto a la formación, el 25,2% de los atendidos no tenían alfabetización y el 36,6% solo la educación primaria. El 11,4% tenían estudios de Educación Secundaria Obligatoria, el 3,4% deBachillerato, el 1,8% un grado medio de FP y solo el 1,9% algún estudio universitario.

Para realizar todas estas laboras, Cáritas Córdoba ha contado con un total de 1.500 voluntarios que han sido fundamentales para brindar el apoyo a las miles de personas vulnerables a través de los 167 grupos de Cáritas en las parroquias cordobesas.

Llamamiento a la solidaridad

El director de Cáritas Córdoba ha hecho hincapié en que los ingresos de socios han incrementado en un 12% durante el 2024, pero que ha sido en gran parte por las ayudas destinadas a la catástrofe natural de la DANA en Valencia, para laque la institución recaudó 340.000 euros. Y es que, "ha habido un aumento de donaciones esporádicas para campañas y tragedias" como la DANA. Sin embargo, "se ha reducido los ingresos en donaciones ordinarias" que son destinadas para las acciones del día a día, como ha señalado Darío Reina, quien ha realizado un llamamiento a los cordobeses para que apoyen durante todo el año.

El obispo de Córdoba, Jesús Fernández, ha mostrado su agradecimiento a los 1.500 voluntarios y a toda la organización porque son "los verdaderos protagonistas" y ha destacado la "fe, el culto y la caridad", como "las tres patas que no pueden faltar para la estabilidad" de las personas. "Mientras haya personas, hay esperanza", ha señalado el obispo, quien ha hecho un llamamiento a la sociedad para que "no espere a que haya una catástrofe para movilizarse", recordando que "la desgracia es vivida por mucha gente cercana", por lo que la sociedad "debe dar un paso al frente para que nadie le falte la ayuda necesaria", ya sea económicamente o mediante un voluntariado.