Los cuatro efectivos del Consorcio Provincial de Bomberos que se han desplazado, junto a un contingente de Bomberos Unidos Sin Fronteras (BUSF), a Marruecos para prestar su ayuda en las labores de rescate de las personas desaparecidas por el terremoto continúan su trabajo acompañados de sus dos perros especializados en rescate, en este momento en la localidad de Amizmiz.

Esta aldea es el epicentro del terremoto de 7 grados ocurrido en la medianoche del viernes y que ha causado casi 2.500 muertos. Situada en las faldas del Atlas, ha quedado devastada por los escombros y los desprendimientos de la montaña. 

El presidente del Consorcio Provincial de Bomberos, Antonio Martín, ha destacado que "tienen por delante una ardua tarea, ya que en la localidad en la que están trabajando se ha caído una montaña sobre la población y buscan a más de 53 personas".

Los cuatro bomberos que se han desplazado hasta Marruecos son Francisco Rodríguez Velasco (parque de Montilla), Juan Fernando Velasco Chacón (del parque de Priego de Córdoba), José Antonio Castro Garrido (parque de La Carlota), que acude con su perro Limón; y Antonio Caballero García (parque de Baena), que va con su perro Bolo.

Caballero y Bolo ya estuvieron el pasado mes de febrero en Turquía en las labores de rescate tras el terremoto de 7,2 grados que dejó más de 47.000 muertos entre el país turco y Siria.

Los efectivos cordobeses llegaron el domingo y, en un primer momento, han estado realizando evaluaciones en Moulai Ibraim y desde allí han sido escoltados por la policía marroquí hasta la localización actual, Amizmiz.

Según información de los cuatro bomberos, han trabajado "con los perros para detectar personas vivas bajo los escombros y restos de la montaña, sin éxito, y se prevé que haya cadáveres sepultados".

"Estamos en continua comunicación con estos efectivos y nos van informando, en la medida de lo posible, de la evolución de los acontecimientos", ha señalado el presidente del Consorcio.