Amaral deslumbra con su 'Dolce Vita' en un potente espectáculo

Eva Amaral aparece bajo una capa negra, transparente, recorre la pasarela que la conecta con el público. Tras ella, un imponente juego visual en el que la batería y el teclado elevados se recortan en una pantalla con imágenes que acompañan a cada canción. Su sonido impecable, potente, invade El Arenal acompañado de cañones de confeti, de juegos de luces, de videoarte. El grupo nacido en Zaragoza hace casi 30 años viene a presentar a lo grande su Dolce Vita, su nuevo disco tras seis años de espera. Un espectáculo que no resta un ápice a su esencia, su música, como demuestra el dúo formado por Eva y Juan Aguirre en solitario interpretando su Sin ti no soy nada. Amaral vuelve a una gira con la misma garra de siempre. En realidad, nunca se ha ido.

El grupo se marca en este tour todo un reto para un conjunto consolidado: presentar las quince canciones de su nuevo disco en cada concierto y que el público vibre con ellas como si fueran esos temas de siempre. En una banda que tiene en su haber una larga lista de himnos que forman parte de la vida de su legión de seguidores y de quienes no lo son, es difícil no caer en la tentación de la nostalgia, de dar al público lo que pide. Pero ellos se arriesgan y logran un concierto redondo, la mezcla perfecta de pasado y presente.

Dolce Vita abre una noche en la que cada canción se convierte en un espectáculo en sí misma. Tras el grupo hay imágenes de una exuberante naturaleza, de la propia Eva recortada en sombra replicando a la cantante. Un vídeo de Víctor Jara cantando Te recuerdo Amanda estremece al público en la presentación de Podría haber sido yo, un homenaje al cantautor chileno. Amaral mide al milímetro el acompañamiento de cada uno de sus nuevos temas, coreados por ese público fiel que les acompaña allá donde van.

Y una tras otra van desfilando las canciones de su nuevo disco con algunos de esos grandes himnos intercalados. Eso que te vuela la cabeza y Tal y como soy dan paso a Toda la noche en la calle. Antes de interpretar con elegancia Tardes, Juan Aguirre explica lo felices que están de venir a pasar calor a Córdoba, “ese lugar misterioso del que han salido muchos músicos que adoramos, nos dan envidia el arte que atesoráis y vuestra cultura”. Esa Córdoba protagonista en su Viernes Santo. No faltan Cómo hablar;Marta, Sebas, Guille y los demás; Resurrección; Días de verano.

Muy lejos queda su última actuación en Córdoba, en plena pandemia, un concierto forzadamente acústico y repleto de medidas de seguridad. Muchos de los que estaban allí entonces están hoy en el recinto de Córdoba Live. Esta noche asistimos al opuesto de aquel escenario, pero la voz de Eva sigue resonando en cada uno de los asistentes como si fuera la misma que hace cinco años, que hace veinticinco. Ese amigo que lleva junto a ti toda una vida. Tal vez por eso, el grupo escoge su nuevo Ahí estás para despedirse y agradecer a su público esa fidelidad recíproca, cerrando un concierto redondo más para sus amigos cordobeses.