Las vacaciones de verano han arrancado ya para miles de alumnos en Córdoba tras un año escolar totalmente diferente y marcado por las restricciones de la pandemia. Ahora, cuando la mayoría de las familias están regresando progresivamente a la normalidad y se han incorporado ya a sus puestos de trabajo, vuelve también la búsqueda de ideas para hacer con los niños y el cuidado por parte de los abuelos durante los próximos meses. 

"Lo único que nos ha separado durante todos estos años ha sido el covid", comentan los abuelos de dos niñas mientras pasean por el centro de Córdoba en el primer día de vacaciones de las pequeñas. La familia Rodríguez Estévez desde siempre ha dejado a sus hijas al cuidado de los abuelos tanto en verano como en invierno, pero durante el confinamiento "la pasamos muy mal sin verlas", expresan. Ahora recuperarán el tiempo perdido por las medidas restrictivas y el especial cuidado que tuvo la familia para no contagiar a los mayores.

Miguel Arvelaiz es el abuelo de tres pequeños, Antonella, de un año, Matteo, de dos, y Alessandra de seis años, a quienes ayudará a cuidar este verano pues su mujer, que aún mantiene la energía, una de sus hijas y sus dos yernos se encuentran trabajando, en turnos muy diversos. La familia hará rondas entre el trabajo y el cuidado de los tres niños, que demandan salir a jugar al parque o visitar a sus demás tíos y primos. 

La familia Merino Martín dan un paseo por el centro de Córdoba

Arvelaiz llegó a Córdoba justo en marzo del año pasado para el nacimiento de la pequeña Antonella y con el confinamiento se quedó "atrapado" en la ciudad junto a su mujer, lo que al final, aunque ha sido difícil, también ha supuesto "una suerte" pues ha podido ver crecer a sus tres nietos, compartir con ellos y ayudar a sus hijas en los momentos difíciles de la crianza. 

Mientras tanto, los abuelos maternos de la familia Merino Martín salen de comprar chuches en una tienda de Las Tendillas con sus tres nietas, de diez, cuatro y seis años, que expresan su felicidad por estar un año más con sus abuelos hasta que vuelvan al cole en septiembre. "Cuanto más veces vengan a casa para nosotros es mejor, estar solos es muy triste", expresan los mayores, que se turnan con los abuelos paternos en el cuidado de las tres pequeñas que "se portan bien, son muy buenas". 

Y de portarse bien y sacar buenas notas en el cole lo saben bien en la familia Martínez, que ha salido con sus tres nietos varones en busca, con mucha emoción, de una juguetería para comprarles un regalo que "se han ganado porque se han esforzado mucho durante el curso", comentan mientras caminan en busca de ese preciado premio. 

Asimismo, Antonio Salas ha planeado diversas actividades para pasar el tiempo con sus nietos este verano a la par que se divierten. Así, lleva al parque y a la piscina a dos de sus nietas, de 12 y ocho años, mientras su hijo y su nuera se encuentran trabajando y el más pequeño de la familia todavía va a la guardería al menos hasta julio, cuando estos centros también cerrarán por las vacaciones y los bebés se sumarán a los planes de sus abuelos.