Viana, también para los más pequeños
Una veintena de niños conoce la historia del emblemático palacio
Una docena de patios, a cada cual más emblemático. Un palacio en el que vivieron sus propietarios hasta los años 80 del pasado siglo y que aún conserva ese tinte de nobleza. Es el Palacio de Viana, que cada día recibe a numerosos turistas y que, además, ofrece visitas teatralizadas para los más pequeños de la casa desde el pasado mes noviembre. Es lo que ocurrió ayer, cuando más de una veintena de niños asistieron a una singular visita, con Fausto de Saavedra -uno de los marqueses de Viana- como guía. Interpretado por Avelino Cazallo -a la postre director de operaciones del Palacio de Viana-, el supuesto conde sedujo a los niños que no dejaron de hacer preguntas a lo largo de todo el recorrido para conocer los entresijos de este gran edificio y mostraron sorpresa ante su relato.
Antes de convertirse en marqués, Cazallo confiesa que su interpretación es una mezcla de los tres marqueses que vivieron en el palacio. "No hay guión concreto y explico para qué se utilizaban los patios o las salas", detalla. De los tres marqueses de Viana, reconoce que se queda con el segundo, José de Saavedra y Salamanca, ya que ocupó importantes puestos en la Real Casa y fue Sumiller de Corps, Caballerizo mayor y Montero Mayor y amigo personal de Alfonso XII. Para su inteligente interpretación -que se prolonga durante casi una hora y media-, Cazallo se sirve de una capa, un sombrero, una pajarita y una vara de mando. Con este atuendo se mete en el papel del marqués de Viana y empieza a relatar la vida y la historia del palacio. Asegura también que son los patios lo que más llama la atención a los niños.
Otro de los aspectos que suele desconcertar a los más pequeños es, según explica Cazallo, es "que el Palacio de Viana se mantenga así después de cinco siglos". En este punto, recuerda que fue hasta la década de los 80 del pasado siglo hasta que el inmueble estuvo habitado por la última marquesa, hasta que vendió el palacio a Cajasur.
Junto a Cazallo, Marisa Estévanez suele interpretar la figura de la marquesa. Trabajadora también del palacio, ayer no pudo convertirse en esta mujer porque el aforo infantil fue reducido. Sin embargo, Estévanez destaca la importancia de este tipo de talleres y visitas, puesto que sirven "para introducir a los pequeños en el mundo del arte". Además, continúa, también aprenden historia y "cómo vivían o cómo compraban" los muebles del palacio.
El Palacio de Viana es, sin duda, uno de los monumentos más destacados de la capital y, al mismo tiempo, uno de los más desconocidos para los propios cordobeses, lo que los gestores del monumento pretenden cambiar con las visitas teatralizadas y los talleres que se celebran eventualmente. La próxima visita teatralizada para los niños será entre los próximos meses de mayo y junio.
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