Urbanismo terminará 2008 con tres cines en cartera para equipamientos
La adquisición de Fuenseca abre la puerta al resto de expropiaciones pendientes de recintos de verano, todos propiedad de Rafael Gómez · Dispone ya del Andalucía y el Almirante, destinados a dotaciones
La Gerencia Municipal de Urbanismo quiere terminar el año 2008 con la propiedad de tres cines cerrados o en uso, recintos que por su extensión y ubicación resultan ideales para su reconversión en equipamientos de carácter social, cultural o deportivo. Las operaciones en marcha se suman a la realizada a finales de los años 90, cuando el Ayuntamiento pactó la adquisición de varios antiguos cines propiedad de la familia Sánchez Ramade cuya puesta en valor no ha concluido.
La operación más avanzada es la de la conversión del antiguo cine Almirante, ubicado en el Parque Figueroa, en un equipamiento social de apoyo al barrio. La intención de Urbanismo es construir en el solar de este edificio un centro cívico y social de forma que se complete el mapa de dotaciones municipales en esta zona del Oeste de la ciudad de Córdoba. El proyecto tiene su asiento presupuestario en el proyecto de cuentas para 2008, pendiente aún de tramitación por parte del Ayuntamiento de la ciudad.
La segunda operación avanzada es la de la adquisición del cine Andalucía, ubicado en el barrio de San Pedro. Los suelos conforman una gran bolsa de terreno libre que pretende convertirse en un aparcamiento complementado por unas instalaciones deportivas sobre la edificación. El solar aún no ha sido transferido a Vimcorsa, que es la empresa municipal que planea desarrollar el proyecto de forma efectiva. Sin embargo, todo el planteamiento queda supeditado al desarrollo de investigaciones arqueológicas ya que, si existen restos en el subsuelo, la programación municipal habrá de ser alterada.
El tercer recinto a expropiar en 2008 es el del cine Fuenseca, uno de los recintos de verano adquiridos en su día por el empresario Rafael Gómez y que intentó canjear al municipio a cambio de una operación para elevar la edificabilidad libre de su promoción de la Carrera del Caballo. Finalmente, se procederá a una expropiación ordinaria, lo que no implica que se alcance un mutuo acuerdo en el caso de que las partes pacten las cantidades. En este caso, parece que no se cumplirá la palabra del constructor que aseguró que regalaría los cines de verano a la ciudad cuando en muchos sectores se empezó a temer por el futuro de estos recintos. Los presupuestos de la Gerencia disponen de un apartado de 1,2 millones de euros para la adquisición del Fuenseca, proyecto ligado a la apertura de un nuevo paso abierto a la manzana de Orive. El plan es crear un equipamiento deportivo compatible con la utilización en verano del recinto como sala de exhibición. Sí parece que será difícil mantener el suelo de tierra característico del cine.
No son las únicas operaciones en marcha en un cine puesto que la Gerencia dispondrá de fondos este año para su aplicación en el cine Magdalena, que en su día se adquirió a la empresa Cinesur. El proyecto municipal, que ya está elaborado, pasa por invertir unos 900.000 euros este año en una idea que convierte el edificio en un teatro de pequeño formato. Existe un principio de acuerdo entre unos empresarios y el Ayuntamiento para la explotación de ese espacio. Se trata de los responsables del proyecto Teatro del Mercado, que pretendían convertir las instalaciones del mercado del Alcázar en un espacio cultural. El problema es que el edificio estaba ya comprometido con el Instituto de Estudios Sociales Avanzados de Andalucía para la ampliación de estas instalaciones ligadas al Centro Superior de Investigaciones Científicas.
El declive de los cines del centro -ya sólo queda uno, el Alkázar, de todos los que abrieron sus puertas- ha generado otro tipo de ventajas. El derribo del Lucano, por ejemplo, ha servido para la construcción de un centro de salud para la parte del Casco donde está radicado. El Góngora podrá rehabilitarse como teatro cuando haya fondos para ello.
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