Urbanismo y Cultura pusieron pegas al centro de visitantes

Tanto la Gerencia de Urbanismo como la Consejería de Cultura ya advirtieron en el pasado a la Consejería de Obras Públicas que tuviera sumo cuidado con el proyecto del centro de visitantes de la Mezquita-Catedral, como ayer hizo Icomos en su informe sobre el resultado de la restauración Puente Romano. Los informes existentes sobre el proyecto de Juan Cuenca se hacen eco de las dificultades de construir en una zona tan compleja de Córdoba como el solar anexo al templo mayor, en una zona de enorme importancia para el patrimonio.

Quizá el documento más concreto sea el de la Oficina del Casco Histórico de la Gerencia de Urbanismo fechado el 26 de diciembre de 2006. Según este documento, se advierte a la Consejería de Obras Públicas de los materiales que se pretenden utilizar en la construcción del equipamiento y el tratamiento de las cubiertas, "ajeno a cualquier tratamiento tradicional". La fachada está compuesta, según el documento, de hormigón coloreado y se estima necesario efectuar pruebas durante el desarrollo de la obra para conocer el resultado final antes de proceder al montaje definitivo. Asimismo, se le reclama a la Junta de Andalucía que efectúe montajes fotográficos previos de forma que se conozca con claridad cuál va a ser el resultado de la intervención.

La Comisión de Patrimonio de la Consejería de Cultura abordó hasta en dos ocasiones esta cuestión, una en 2004 y otra en febrero de 2006. El último documento sigue manteniendo las preocupaciones expresadas por el departamento autonómico, sobre todo por la altura del edificio (35 metros en su punto más elevado) así como el acabado de la cubierta, que no utiliza la teja cerámica sino que apuesta por un tratamiento de grava.

Hay que precisar que, en ambos casos, se ofrece un visto bueno general al proyecto, aunque quizá se precisen ciertos aspectos para que quede constancia ante contingencias futuras. En el caso de la Gerencia de Urbanismo, se trata de un informe independiente al que efectuaron sus técnicos para la concesión de la licencia de obras del edificio, cuyo cuerpo principal es un prisma de imagen opaca, revestido con piezas prefabricadas de hormigón abierto sólo en planta baja con una banda de vidrio de 2,3 metros de altura. Icomos ha solicitado a la Junta que adecue el proyecto al entorno en composición, volumen y materiales.