Una cita para el recuerdo para la prohermandad de la Salud. Tras la bendición de su titular de este pasado sábado en la Mezquita-Catedral por el obispo Demetrio Fernández, la corporación de Puerta Nueva realizó una salida procesional desde el primer templo de la diócesis cargada de sentimiento y de alegría. Era el momento de volver con el Señor a la parroquia del Carmen, su sede canónica.

A la hora fijada, la cruz de guía de la prohermandad de la Salud asomó a un atestado Patio de los Naranjos. Multitud de fieles y devotos no quisieron perderse una salida para la historia, la primera de la nueva talla realizada por Manuel Luque Bonilla, que sustituye a la anterior, cedida por un particular y que fue retirada del culto en diciembre de 2020. Todo fue posible gracias al protocolo aprobado el pasado mes de septiembre para el culto religioso en la vía pública. Y también por la baja tasa de incidencia del covid-19.

El cortejo, que contó con la presencia de las cofradías hermanas de las Penas de Santiago y el Remedio de Ánimas, avanzó hacia la Puerta de Santa Catalina cuando se escuchó el martillo golpeado por el capataz Juan Horacio de la Rosa. Paso a paso se acercó a la Puerta de Las Palmas. Los flashes de las cámaras y de los móviles avisaban ya de que se acercaba el momento de ver al Señor de la Salud. Sonó el himno por la Agrupación de la Redención de Córdoba. Arrancó así un largo camino de más de seis horas de regreso hacia Puerta Nueva.

Junto a Judas, el Señor de la Salud -se completará el misterio con cinco figuras más (Manuel Luque trabaja ya en la figura de Santiago)- abandonó el Patio de los Naranjos para enfilar hacia las calles estrechas de la Judería. Siempre bajo la atenta mirada de su hermano mayor, Rafael Cano. Deanes y Conde y Luque volvió a contar con un gran hervidero de fieles, como en un gran día de la Semana Santa cordobesa, que no quisieron perder esta histórica salida.

Numerosos fieles presenciaron en el Patio de los Naranjos la salida del Señor de la Salud.

Tras salir de la Judería, el Señor de la Salud subió por Blanco Belmonte, Ángel de Saavedra y Jesús y María hacia la Plaza de las Tendillas para recorrer posteriormente San Miguel y San Zoilo antes de enfilar el camino de regreso hacia su barrio por Alfonso XIII, San Pablo, San Andrés, Muñices y la plaza de la Magdalena. Todo ante la mirada de devotos, fieles y numerosos cofrades, algunos llegados desde otros puntos de la provincia e incluso de Andalucía.

La llegada a la calle Ronda de Andújar, siempre con los sones musicales de la Agrupación de Redención, presagió el tramo final de un gran día para el recuerdo para una prohermandad de la Salud que sueña ya con su salida procesional del próximo Jueves de Pasión.