Un PCA dividido elige a Miguel Ángel Peña nuevo secretario provincial

El Partido Comunista (PCA) se enfangó ayer en el debate y mostró una clara división a la hora de elegir a la persona que sustituirá en la secretaría provincial del partido a José Manuel Mariscal. Tras semanas de intentos infructuosos para presentar una candidatura unitaria a la cúpula del partido, la realidad se impuso y el comité provincial tuvo que elegir entre dos listas: una encabezada por el diputado provincial Pedro Membrives y otra liderada por el militante Miguel Ángel Peña.

Este último, que contaba con el actual coordinador provincial de IU, Fracisco Martínez, como principal aval se impuso a su oponente por sólo un voto de ventaja. La candidatura de Peña cosechó 68 votos y la de Membrives, 67, informaron fuentes del partido. Al cónclave asistieron 146 personas, el 86% de todos los delegados de la provincia. La votación, que se produjo pasadas las 15:00 después de una mañana intensa de debate, se saldó además con cinco votos en blanco y uno nulo.

Tras la derrota de su candidatura, Membrives -que había sido arropado por Mariscal- decidió retirar su nombre en la votación final para el cargo de secretario. El nuevo comité provincial, por tanto, está integrado por 18 miembros de la lista de Peña, 17 del equipo de Membrives y un portavoz de las juventudes comunistas. Faltan aún los 15 representantes de las comarcas, informaron fuentes del partido.

"Que no se haya podido llegar a una lista unitaria es lo de menos. Lo más importante es que hay unidad en las decisiones políticas", dijo el nuevo secretario, quien recordó que el comité fue unánime al votar tres resoluciones que se llevarán al congreso andaluz del fin de semana. Una de ellas es una apoyo expreso al actor Guillermo Toledo, envuelto en la polémica en las últimas semanas por su opinión sobre los presos de Cuba. Las otras resoluciones defienden la escuela laica y la necesidad de prohibir el uso de harinas cárnicas en las orujeras.

Peña avanzó que trabajará para que "el partido tenga mayor presencia en las ciudades medias de la provincia y en la capital" y con el objetivo de frenar desde IU "las políticas de derechas". El nuevo secretario abogó por que Córdoba "siga siendo un baluarte de la izquierda real" y apostó por un mayor acercamiento a la "clase trabajadora". Otra de sus líneas de trabajo se centrará en la recuperación de la memoria histórica. "Hay unidad en la base y en la política, y el comité está unido", zanjó el nuevo secretario.