Una exposición del Museo de Bellas Artes de Córdoba presenta 24 dibujos de la colección de la pinacoteca fechados entre los siglos XVI al XVIII, de los que atribuye la autoría a 14, ratifica la de uno y formula la duda sobre la paternidad de otros dos.

Miscelánea de dibujos de los siglos los siglos XVI al XVIII del Museo de Bellas Artes de Córdoba presenta hasta el 2 de junio lo que es el "fruto de la labor de investigación del museo" en la sexta de las exposiciones de dibujos de las desarrolladas en los últimos años que, en esta ocasión, "no corresponden ni a un periodo concreto ni a un ámbito geográfico determinado, sino que eran dibujos que son poco conocidos o se han estudiado y sobre los que ha habido nuevas atribuciones de autoría".

Así lo ha expresado el director del centro cultural, José María Domenech, para quien este ciclo de iniciativas supone "revertir el trabajo de investigación que hace el museo a la sociedad". Los dibujos seleccionados para la exposición cierran una etapa de estudio y divulgación de la colección de dibujos de la pinacoteca cordobesa, ya que, aunque "todavía queda alguno más por estudiar, fundamentalmente son relacionados con la arquitectura para retablos", según ha señalado el asesor técnico de conservación e investigación del Bellas Artes de Córdoba, José María Palencia.

Los 24 dibujos se dividen en tres bloques. El más numeroso, apunta Domenech, es el que componen las 16 obras de autores andaluces, 12 de ellos cordobeses, tres granadinos y un sevillano. Otro bloque es el de autores valencianos y el tercero lo componen cinco originales de pintores llegados de Italia.

Núcleo de artistas de Felipe II

José María Palencia ha destacado que en la exposición se "descubre el núcleo de artistas que teníamos en la colección de dibujos relacionados con los italianos que en época de Felipe II vienen a España, fundamentalmente desde Génova, para pintar en el Monasterio del Escorial y también en el Palacio del Viso del Marqués".

En concreto, "tres dibujos de estos no se habían estudiado todavía en profundidad" y tras su análisis se relacionan con los círculos de Nicolás Granello, Juan Bautista Perolli y Juan Bautista Castello El Bergamasco.

La exposición de dibujos, en el Museo de Bellas Artes de Córdoba.

"Otro dibujo que también estaba publicado como italiano, pero que nosotros acabamos de relacionar con el círculo de Fernando Yáñez de la Almedina (Almedina, Ciudad Real, 1475-1540), que es un pintor valenciano que se va a Italia, está por Florencia, y allí conoce la obra de Miguel Ángel y de Rafael, y después volverá a Valencia y pintará en la Catedral", ha precisado Palencia.

Dentro del ámbito valenciano, ha concretado el conservador del museo, se presenta un dibujo del siglo XVII que es preparatorio para un grabado de San Luis Beltrán que no se llegó a realizar y que se atribuye a Francisco Quesadez, del que se "sabe que es un grabador de la época".

Dibujos cordobeses

En el grupo de dibujos cordobeses aparecen atribuciones a Juan de Alfaro y Gámez y Antonio Palomino Velasco. Del primero, José María Palencia pone de relieve "el dibujo del caballo del cuadro de las Lanzas de Velázquez, que probablemente Juan Alfaro hiciera allí mismo al pie de cuadro en el salón del Reino del Buen Retiro, quizá ya cuando era discípulo de Velázquez, en Madrid, antes del fallecimiento del mismo en 1660".

En la sala I de Dibujos y Estampas del Museo de Bellas Artes de Córdoba también se pueden contemplar los dibujos que eran considerados de autor anónimo y que ahora se atribuyen a Blas de Prado (Camarena, Toledo, 1545- Madrid, 1599), que trabajó para Felipe II; el cordobés Bartolomé Fernández; y el valenciano Vicente Castelló Comes. También se adjudica a Manuel Francisco de Arias Contreras, natural de Pegalajar (Jaén), aunque afincado en Córdoba, una obra atribuida en un principio a Juan de Alfaro.

Las investigaciones desarrolladas plantean dudas sobre la creación de una Inmaculada Concepción a la sanguina, una técnica basada en una variedad de óxido de hierro, que llegó al museo, cuando se adquirió atribuida al granadino Pedro Atanasio Bocanegra, principal seguidor de Alonso Cano, pero se cree que podría pertenecer a otro pintor de la escuela granadina, Pedro Moya.

Asimismo, plantea la dicotomía de una obra que presenta sendos originales por ambas caras, un San Roque y un Diseño de cabeza femenina y querube, sea bien de Juan Antonio de Frías y Escalante o de Juan de la Cruz Molina, ambos cordobeses, para cuya concreción habrá que esperar "hasta el momento en que pueda realizarse su estudio mediante procedimientos más claramente científicos, o se encontrase la pintura para la que habría podido ser estudio previo", tal y como refiere el catálogo de la exposición.

Por último, la muestra presenta otras dos novedades sobre el cordobés Antonio Palomino Velasco, aparte de la atribución de San Joaquín. Se ratifica que es suyo la Figura de Cristo Salvador y se rechaza que el San José con el Niño pertenezca a su hija Francisca y se considera que corresponde a su círculo.