El Foro Economía y Sociedad, organizado por la Asociación de Empresas Fabricantes y de Servicios de Córdoba (Asfaco), ha vuelto a celebrarse en la capital cordobesa y, esta vez, ha girado en torno de un colectivo económico formado por 3,3 millones de personas en España: los autónomos. En el encuentro, denominado El contexto económico actual y los retos del autónomo, ha participado el presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, que ha hecho un balance completo de la situación de un sector que podría cerrar en números negativos este año tras verse profundamente afectado por las subidas de precios e impuestos en 2023.

"Muchos autónomos abren la persiana sabiendo que van a tener más gastos que ingresos", es la realidad para gran cantidad de personas del sector, sobre todo de los pequeños empresarios y comerciantes que han abierto un negocio para sostener a sus familias. Aunque los autónomos y las empresas están vendiendo un 11% más, también están pagando un 23% más de costes, según los datos que ha aportado ATA. Las hipotecas de los locales, los alquileres, costes laborales, impuestos, las cotizaciones sociales, la cuota mínima, que ha subido un 8%, o el aumento del precio en las materias primas han sido el caldo de cultivo perfecto para frenar la creación de autónomos en España, que podría cerrar en números negativos este año, según ha comentado Lorenzo Amor en conversación con El Día.

"La afiliación de autónomos no va bien ni en España ni en Córdoba", ha destacado el también vicepresidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE). En Andalucía los datos van mejor, con la creación de más de 3.500 autónomos en el último año, mientras que Córdoba pierde 160. Son seis comunidades autónomas las que están tirando del crecimiento, sobre todo las ligadas al turismo, que se mantiene. "Podemos cerrar este año con números negativos en España", alerta Amor. 

Con este panorama, hay una idea que forma parte del debate habitual y se ve reflejada en una última encuesta de Infoempleo y Adecco, donde resulta que el 65% de los autónomos dicen serlo por necesidad y el otro 35%, por convicción. Sin embargo, hay una cifra cuanto menos curiosa en la encuesta, porque el 54% se muestra "feliz" de serlo. Lorenzo Amor está convencido que los autónomos lo son "por una oportunidad" y lanza algunos datos: el 30% de los 53.000 trabajadores por cuenta propia que hay en Córdoba lo son desde el siglo pasado, lo que significa, para él, que "ser autónomo es una forma de vida". 

Asistentes al Foro de Economía y Sociedad.

El 70% de los autónomos tiene más de tres años, el 60% se muestra feliz con lo que hace y asegura que, de volver a nacer, volvería a escoger ser emprendedor, agrega el presidente de ATA, que, aún así, admite que en los últimos cinco ejercicios ha aumentado el número de personas mayores de 50 años que se hacen autónomos, en su mayoría trabajadores que vienen de ser asalariados en empresas. "Han perdido su puesto de trabajo, por reestructuración de las empresas, y se han hecho autónomos", agrega, es decir, que sí hay una necesidad para las personas mayores, que no consiguen salida en el empleo formal. 

En este sentido, y con una situación política en España plagada de incertidumbres, el presidente de ATA, organización que cumplirá en breve 30 años de existencia, con más de 550.000 asociados, y que es referente de la arquitectura empresarial institucional española, ha recordado que las peticiones del sector "están hechas" a los partidos políticos. "Hay cosas que en las que el gobierno puede actuar y otras que no", ha matizado, pero, eso sí, ha agregado que "no se puede demonizar al tejido empresarial y poner zancadillas y trabas" al sector.

En España "estamos en el top 3 de las cotizaciones más elevadas de Europa, eso es un castigo a la generación de empleo y la actividad económica", ha criticado Lorenzo Amor, "con una inflación que ha disparado los impuestos" y "el problema es que lo menos que se podía haber hecho era deflactar la tarifa". Así, el presidente de los autónomos considera que "siempre hay posibilidades de actuar, de ayudar y no poner trabas o retorcer más al tejido empresarial", concluye.