El Juzgado de Menores es el más saturado de toda la comunidad

El Juzgado de Menores de Córdoba está al borde del colapso. La memoria que anualmente elabora el Tribunal Superior de Estadística de Andalucía (TSJA), presentada ayer, pone en evidencia la situación por la que atraviesa el órgano cordobés ante el aumento de delitos protagonizados por menores en los últimos meses, hasta el punto de que es el órgano de esta jurisdicción que más carga de trabajo soporta de toda la Comunidad autónoma. Los datos del informe son contundentes: el juzgado cordobés asumió a lo largo de 2007 más del doble de casos -en concreto, un 111,8%- que lo aconsejado por el alto tribunal andaluz. Se trata del índice de saturación más alto de toda Andalucía, pues sólo Almería, con un 84,6% más de casos, se acerca a esta situación extrema.

En el polo opuesto se encuentran provincias como Huelva -donde el juez de menores asumió un 43,5% de casos del tope aconsejado-, Málaga -con un 15,7% menos de asuntos- o Sevilla -con un 9,5% menos. La memoria del TSJA pone el techo en los 650 asuntos por año e indica textualmente que un juzgado de menores está "al límite de su carga" cuando recibe 800 más de este número. Córdoba, con 1.377 asuntos -727 expedientes sobre el límite-, se aproxima a ese estado. Así que la respuesta del TSJA es la creación del segundo juzgado de menores de Córdoba, un asunto que queda en manos del Gobierno central siempre que lo propongan la Junta de Andalucía y el alto tribunal.

A lo largo de 2007, la provincia registró varios casos que abrieron una reflexión sobre la delincuencia juvenil. Asuntos como el asesinato de un hombre en Lucena a manos, supuestamente, de tres menores de edad; un caso grave de acoso escolar en el Instituto de Enseñanza Secundaria Gran Capitán, en Córdoba capital, y la detención de varios menores por coaccionar a una joven para mantener relaciones a cambio de no hacer públicas unas imágenes comprometidas obligaron a abrir una reflexión. Ayer fue el propio presidente del TSJA, Augusto Méndez de Lugo, quien reclamó una respuesta de toda la sociedad contra la violencia juvenil.

El juez de Menores de Córdoba y actual decano, Luis Rabasa, ya se ha referido en varias ocasiones a la situación que atraviesa su juzgado. Esta sobrecarga de casos se puede achacar "a que cada vez hay menos educación en valores en la propia familia y en la escuela", lamentó Rabasa en una entrevista el pasado noviembre.