“Burocracia actual frente a diligencia, digitalización y agilidad administrativa para empresas y particulares”. Es la propuesta que hace el candidato del PSOE a la Alcaldía de la capital. Antonio Hurtado asegura que el sistema actual de ayuda a las empresas es “insuficiente e ineficaz” y anuncia que a partir del próximo día 28, “cuando sea alcalde de Córdoba”, pondrá en marcha lo que ha denominado “Espacio empresa”, un área de la administración municipal que se dedicará a atender sus necesidades.

El alcaldable por el PSOE ha visitado en Villarrubia una empresa dedicada a grandes instalaciones de carpintería metálica. Allí ha destacado que este negocio, al igual que muchos otros, requiere de asistencia por parte del ayuntamiento en cuanto a ubicación, regularización de los terrenos en los que se asienta o en su preparación de cara a la gran demandante de trabajos que será la Base Logística del Ejército de Tierra (BLET).

“Tenemos que prepararlas porque en la BLET, además de los 1.700 empleos que se van a crear (unos 1.000 de ellos civiles) muchas empresas van a ser proveedoras del Ministerio de Defensa. Para eso tienen que estar adaptadas, deben tener las homologaciones correspondientes”, explica Hurtado.

Una de las labores fundamentales de este Espacio empresa será la interlocución con el ministerio para saber cómo deben proveer ese tipo de servicios. “Tenemos que conseguir sacar el máximo provecho y el mayor número posible de empleos indirectos, al igual que haremos con la Plataforma logística de promoción pública que vamos a poner en marcha. Va a necesitar muchos inversores, muchos emprendedores y muchas empresas proveedoras. Adaptarlas y formarlas en las necesidades de la logística será un objetivo prioritario para mi gobierno.

Demasiada burocracia

Por otra parte, el “Espacio empresa” trabajará para eliminar la excesiva burocratización que existe en estos momentos en el ayuntamiento en lo que respecta a licencias, resoluciones administrativas y otras muchas cuestiones.

El también diputado nacional considera que con Bellido “la maquinaria de Capitulares ha dejado de funcionar en muchos casos o va demasiado lenta en otros. Es uno de los problemas de las empresas. Nos piden constantemente diligencia, agilidad en los procesos administrativos. Quieren ser cumplidoras, pero muchas veces se les hace muy complicado porque el laberinto administrativo les llega a impedir hacerlo en tiempo y forma”.