El director de la Fundación Cajasur y patrono de Convisur, Ángel Cañadilla, y el presidente de Iemakaie, José María Lovera, han firmado recientemente un convenio por el que las Fundaciones de Cajasur se comprometen a seguir colaborando con la citada oenegé en dos proyectos claves para las residencias que posee en las localidades de Guadalcázar y Montoro.

La ayuda aprobada en el último Patronato de las Fundaciones va a hacer posible culminar dos proyectos de calado: por una parte, finalización del acondicionamiento y adaptación de la construcción anexa a la residencia para personas con graves trastornos de conducta que gestionan en Guadalcázar. Esta reforma posibilitará solicitar la acreditación de tres plazas más para residentes, pasando de las 27 actuales a las 30. Con ello darán una mayor y mejor cobertura a una necesidad cada vez más demandada por la sociedad.

Por otra parte, la segunda parte de la colaboración permitirá a la asociación completar el equipamiento necesario para la ampliación del servicio sanitario de atención infantil temprana, que tiene como beneficiarios directos a 70 niños y niñas de cero a seis años con trastornos en su desarrollo o riesgo de padecerlos y a sus familias, y que gestionan en el Centro de Atención Infantil Temprana (CAIT) en Montoro.

El director de la Fundación Cajasur y patrono de Convisur, Ángel Cañadilla, ha explicado que este acuerdo engloba "la vocación de las Fundaciones de Cajasur de prestar especial atención y dedicación a sectores necesitados de nuestra sociedad y, entre ellos, se encuentran los enfermos de esta dolencia a los que hay que acoger y cuidar como hace Iemakaie".

Por su parte, el presidente de Iemakaie, José María Lovera, ha indicado que en nombre de la asociación, "que es como decir en el nombre de las personas a las que intentamos ayudar, damos las gracias a estas dos Fundaciones que nos permiten culminar con su ayuda estos dos proyectos de indudable calado social".