Las organizaciones empresariales de Córdoba y Jaén han reclamado este lunes a la Junta de Andalucía la unión de las dos ciudades a través de autovía mediante la conversión en esta vía de gran capacidad de la actual carretera A-306 El Carpio-Torredonjimeno, un proyecto que la Junta de Andalucía ha descartado por el momento ante su alto coste. 

Según las Confederaciones de Empresarios de Córdoba y Jaén, a esta acción debe unirse la conversión en autovía de la carretera A-311, que enlaza Jaén con Andújar a través de Fuerte del Rey, para entroncar con la A-4, que une Madrid y Sevilla a través de Córdoba.

Tras una reunión de los presidentes de ambas organizaciones, Antonio Díaz y Bartolomé González, los representantes empresariales han valorado las inversiones de cerca de 17 millones de euros en la A-306 y de 16,5 en la A-311 por parte de la Junta de Andalucía, para mejorar la capacidad de ambas vías, aunque con esto "no se puede dar carpetazo a una reivindicación que llevamos años haciendo por su importancia en el desarrollo de ambas provincias como territorios", precisó el dirigente jienense. Tanto CEJ como CECO confían en que estos proyectos de mejora no sean "un parche más" ni sirvan como excusa a la conversión de ambas carreteras en autovías. 

A juicio de las dos confederaciones empresariales, ambas carreteras ofrecen cifras de tráfico "más que suficientes para priorizar la conversión de ambas carreteras en vías de altas prestaciones con las que, además, se lograría el enlace por autovía de las únicas capitales andaluzas que aún no están conectadas".

Además, supondría "un factor clave en la activación económica y social de las poblaciones que incluye, así como un revulsivo para que se promover nuevas empresas en torno a los importantes polos industriales que forman parte de los trazados de estas vías".

Bartolomé González reclamó también que los proyectos prometidos cuando se está en la oposición "se conviertan en prioridad cuando se gobierna", en alusión al cambio de criterio experimentado por la Junta de Andalucía respecto a estas dos carreteras, y aludió a los peligros de una política de inversiones desequilibrada "que ahonda en una Andalucía a dos velocidades donde los territorios más desfavorecidos son incapaces de escalar posiciones para equiparse al resto".

Por su parte, Antonio Díaz ha subrayado "la necesidad de estas infraestructuras para garantizar el desarrollo de los territorios y lo que supondría para hacerlos atractivos a posibles inversores".

"La autovía es clave, necesaria y obligatoria de cara a potenciar además las zonas rurales y evitar su despoblamiento e impulsar la actividad empresarial y con ello la creación de empleo", ha dicho Díaz, al tiempo que ha incidido en que se trata de "una reivindicación histórica de ambas provincias", por lo que "ha llegado la hora de los hechos y asumir responsabilidades".

La A-306 tiene una densidad media diario de 4.500, con un porcentaje de tráfico pesado que alcanza picos del 13%. Por su parte, la A-311 registra una densidad de tráfico diario de unos 3.800 vehículos, con un porcentaje de tráfico pesado cercano al 3%.

Estos datos deberían ser, a juicio de las dos organizaciones empresariales, "más que suficientes para priorizar la conversión de ambas carreteras en vías de altas prestaciones con las que, además, se lograría el enlace por autovía de las únicas capitales andaluzas que aún no están conectadas".

Una inversión de 450 millones de euros

La unión por autovía entre Córdoba y Jaén a través de la carretera autonómica A-306 supondría un desembolso para la Junta de Andalucía muy importante, de ahí que la Consejería de Fomento decidiera hace casi dos años aparcar la iniciativa. Según los documentos que hizo públicos el departamento que dirige Marifrán Carazo, ese presupuesto es de 450 millones de euros, con lo que desdoblar la A-306 costaría hoy día casi el doble que hace diez años.

En el estudio informativo que la Consejería de Fomento presentó a los alcaldes en junio de 2020 se deja claro que el presupuesto es uno de los hándicap para convertir en autovía el tramo de El Carpio a Torredonjimeno.

De hecho, el documento cita literalmente que “no cabe duda de que la solución de ejecutar la autovía sería la más beneficiosa y segura para lo usuarios de la carretera”. Añade que esta alternativa supondría ejecutar una doble calzada en la A-306, con dos carriles cada una y único sentido de circulación, cruces a distinto nivel y vías de servicio que darían acceso a las fincas colindantes.

“Esta solución aumentaría la capacidad de la carretera, aumentaría la calidad y seguridad de los viajeros y disminuiría el índice de siniestralidad”, indica uno de los capítulos de este diagnóstico que ya avanzó el Día.

Pese a todas esas ventajas para los conductores, el estudio de viabilidad de la Consejería de Fomento concluye que la autovía a Jaén “tendría como principal inconveniente el alto coste de las obras y el que la redacción de los proyectos y estudios técnicos necesarios, supondría un retraso de varios años en la consecución de la alternativa de autovía”.

Otro de los párrafos de este diagnóstico es todavía más contundente y afirma que, “como se demuestra en el presente Estudio de Viabilidad”, realizar el refuerzo del firme, construir carriles de servicio disminuyendo el número de accesos, así como los carriles adicionales para adelantamientos, “mantendrá la capacidad de la vía y mejorará la seguridad”.

También dice que la autovía “podría contemplarse como una solución a largo plazo, en el caso de que las condiciones del tráfico y el desarrollo futuro hagan necesario un aumento de la capacidad de la carretera”.

Y ante esta afirmación tan firme, la Junta de Andalucía ha optado por otra cosa, una actuación mucho más económica y que, según aseguran, se podrán realizar con más agilidad. La alternativa elegida, sin renunciar en el futuro a la autovía, si bien su ejecución resultará cada día más difícil por el incremento del coste de las obras, es una inversión mucho mas modesta, de unos 23,3 millones de euros.