El aumento de los contagios de coronavirus y de la incidencia en las últimas semanas empieza a alertar sobre una quinta ola en pleno verano. En esta ocasión, los más afectados son los jóvenes, por lo que en principio las consecuencias no deberían ser igual de trágicas (en lo que a muertes e ingresos en UCI se refiere) que en olas anteriores, cuando el covid-19 se cebó con las personas mayores, un grupo de riesgo para esta enfermedad. Ahora, en su mayoría estos están vacunados y las posibilidades de que tengan que ingresar tras infectarse se reducen de forma considerable.

Por lo tanto, el escenario o epicentro de la lucha contra el covid se ha trasladado de los hospitales a los centros de salud en un periodo, el verano, en el que las plantillas se reducen por las vacaciones y la falta de sustituciones.

La mayoría de los jóvenes son asintomáticos o tienen síntomas leves, así que su seguimiento se hace desde las consultas de Atención Primaria. Es en este nivel asistencial -la puerta al sistema sanitario- donde también se recogen las muestras para las PCR o test de antígenos y se rastrea a los contactos de los positivos, un trabajo que hacen las enfermeras. Esto ha provocado un "colapso" en los centros de salud, según denuncia el Sindicato Médico de Córdoba (Simec).

"La situación lleva mal desde hace años y empeora por momentos", explica la secretaria del Simec, Inmaculada Romero. Ahora, sobre todo con la brusquedad en la que está expandiendo el covid, "la primera parte colapsada de la sanidad vuelve a ser la Atención Primaria".

La situación en Primaria "lleva mal desde hace años y empeora por momentos"

"Ya estábamos mal" y ahora se suman "las vacaciones y compañeros de baja porque tienen un estrés crónico desde que comenzó la pandemia", mientras que "la Administración no hace nada" ante las reiteradas denuncias del sindicato.

Romero incide en que "la situación es peligrosa y se sigue manteniendo: se continúan ofreciendo malos contratos que hacen que nuestros compañeros se tengan que ir a otras comunidades autónomas o a otros países". Esto ha provocado que los pocos contratos que se han ofertado para este verano hayan quedado prácticamente desiertos: el Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha cubierto menos del 10% de ellos, según datos del propio Simec.

Todo esto ha provocado que "la Atención Primaria esté colapsada ahora mismo y no sabemos esta quinta ola hasta dónde llegará". De momento, como resalta Romero, la situación no está siendo tan grave a nivel hospitalario, "aunque ya están empezando a llenarse las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) también porque los segundos contagiados sí son de más edad". Esto se explica porque aunque los jóvenes sean los que cogen el virus, luego "se lo llevan a casa".

Hay que destacar que la vacuna no evita contagios, aunque sí atenúa que los efectos del coronavirus. Sin embargo, en algunos casos, dependiendo del nivel de anticuerpos que cree la persona, también puede acabar en un ingreso a pesar de tener la pauta completa.

En algunos centros de salud las citas para el médico de familia se dan a 14 días vista

La secretaria del Simec insiste en que "la Atención Primaria es la puerta de entrada al sistema sanitario y debería ser, como lo es en otros países, su parte más fuerte; sin embargo aquí se ningunea, se contrata a médicos sin especialidad y a la especialidad de Medicina de Familia no se le da ninguna importancia en España". En su opinión, "quizás algún día se den cuenta de que reforzando la Primaria habrá menos problemas en la hospitalaria, pero de momento es la cenicienta".

Ahora mismo, en los centros de salud los médicos atienden a los pacientes en sus consultas diarias, hacen visitas domiciliarias y asisten urgencias. Encima, tienen "una sobrecarga de pacientes covid". Todo ello con una plantilla mermada y viviendo el día a día con "impotencia y frustración. "No se puede llegar a tanto y, sobre todo, haciendo doble o triple cupo", indica Serrano. Es decir, al no haber sustituciones, los facultativos tienen que asumir los pacientes de los compañeros que están de vacaciones. 

Por otro lado, esto afecta también a la tardanza en obtener las citas para el médico de familia. En algunos centros de salud de Córdoba se están dando a 14 días vista "e imagino que se irá alargando si las circunstancias siguen así", asevera la secretaria del Simec.

Según señala, desde el sindicato han planteado en el Distrito Sanitario Córdoba "posibilidades de mejora, pero no se nos escucha, por lo que la solución no se ve".