Córdoba recuerda a Gabriel
solidaridad
Varios centenares de personas se concentran en el Bulevar con dibujos de peces y girasoles
Familiares de desaparecidos exigen igualdad de trato
La canción Girasoles, de Rozalén, era una de las favoritas de Gabriel Cruz. "El mundo está lleno de mujeres y hombres buenos", una de las estrofas del tema, sonaba ayer mientras centenares de personas se acercaban al Bulevar de Gran Capitán sobre las 16:45. En muchos puntos del país se sucedieron concentraciones para pedir justicia por el asesinato de Gabriel y el de tantas otras personas, concentraciones que, por otra parte, sirvieron también para reclamar la no derogación de la prisión permanente revisable. Sin embargo, la de Córdoba no contó tanto con esa parte reivindicativa y sí se nutrió del lado más conmemorativo.
Centenares de personas acudieron así a un encuentro convocado por cordobeses de a pie, no pertenecientes a ninguna organización, y que desde un rato antes de que diera comienzo el acto montaban un pequeño escenario, un altavoz y repartían girasoles y dibujos de peces (al pequeño Gabriel sus más allegados le llamaban pescaíto). También se podían ver chapas de color azul en las que había impresa una frase: No a la violencia. Llamaba además la atención la presencia de niños, pequeños de la misma edad de Gabriel que habían coloreado sus peces y que también portaban pancartas con mensajes como "Todos somos Gabriel", "Para ti Gabriel, descansa en paz" o "Todos nadamos en el mismo mar".
Muchos cordobeses se acercaron hasta el céntrico bulevar para mostrar su apoyo a la familia del niño almeriense, y es que ese apoyo fue el reivindicado en una lectura inicial donde se quiso "honrar la memoria de tantas víctimas que han caído en manos de asesinos" y pedir "que las familias tengan más apoyo". En el acto se pudo ver a todos esos cordobeses, entre los que se encontraban además varios políticos del PP, como el presidente del partido en Córdoba, Adolfo Molina, o su portavoz en el Ayuntamiento y próximo candidato a las elecciones municipales, José María Bellido, entre algunos otros, sin verse entre los asistentes a representantes de otras organizaciones políticas mayoritarias.
Ese aliciente conmemorativo de la concentración cordobesa también se sirvió del espacio cedido durante el encuentro a las familias de los desaparecidos, que pidieron a las autoridades competentes que todos los casos se traten como se ha tratado el de Gabriel, poniendo los medios disponibles desde el primer momento. Así lo contó el hermano de la desaparecida Ángeles Zurera, Antonio Zurera, quien afirmó que "se necesitan medios humanos y técnicos, nos gustaría ver que los medios puestos en algunas situaciones fueran comunes en todas las desapariciones. A algunos casos se les dedican infinidad de medios y otros se cierran a los tres días". Zurera puso de manifiesto el gran problema que supone la desaparición de personas en España donde, añadió, desaparecen de media unas 60 personas diarias. Zurera agradeció además citas como la citada concentración y apuntó que "necesitamos palabras de apoyo y actos como éste".
En esta manifestación también estuvo presente Isidro Molina, padre de Paco Molina, el joven desaparecido hace ya dos años, cuando contaba con 16. Molina contó su experiencia personal y acerca del caso de su hijo afirmó que "actualmente existen líneas de investigación, pero vemos que se pasan los días y esas líneas no dan resultado ninguno. Esperemos que algún día den resultado y lo podamos encontrar". En estos momentos, hay siete cordobeses desaparecidos, según los datos del Centro Nacional de Desaparecidos, un organismo creado recientemente.
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