Condenado a dos años por un atropello mortal a una madre y su bebé en Lucena

El Juzgado de lo Penal número 5 ha condenado a penas que suman dos años y tres meses de prisión a L. M. O. P., un joven de la localidad de Lucena, por la muerte de una mujer y su bebé como consecuencia de un atropello en el citado municipio. El suceso tuvo lugar sobre las 20:30 del 9 de julio de 2008 en el camino Peñón del Grajo del término municipal de la localidad de la Subbética. Según la sentencia, el encartado iba al volante de un vehículo Peugeot Partner propiedad de su padre a una "velocidad excesiva" para las características de la vía, que estaba limitada a 30 kilómetros por hora -L. M. O. P. alegó durante el juicio que no recordoba a qué velocidad marchaba-.

Esto provocó, según la resolución, que el conductor introdujera la rueda delantera y trasera izquierdas del coche en la cuneta, tras lo que hizo un giro brusco" que le hizo perder el control del turismo. Como consecuencia de la maniobra, L. M. O. P. atropelló a varios peatones que caminaban en ese momento en fila india por el margen izquierdo del camino, por lo que fallecieron una mujer de 26 años y su bebé, que en ese momento sólo tenía 11 meses. El padre del pequeño resultó con heridas leves, lo que para la juez constituye un delito de lesiones por imprudencia.

El imputado, que obtuvo el carné de conducir en septiembre de 2008, no fue capaz de realizar durante la vista oral -celebrada el pasado 3 de octubre- un relato pormenorizado del suceso. L. M. O. P. aseguró que conocía bien la carretera debido a que su familia tiene cerca una vivienda, por lo que pasaba por allí "de forma habitual". "Vi a unos peatones por el lado derecho y me aparté al izquierdo", explicó.

El imputado, no obstante, dijo no recordar que hubiera girado luego bruscamente a la derecha, momento en que según aseguró el fiscal se habría producido el atropello. "Cuando se fue la nube de polvo, vi a la mujer en el suelo", relató el joven, quien insistió en que la carretera donde se produjo el suceso "es muy estrecha".

La pareja y el niño, acompañados de un perro -que también murió- se dirigían a la casa de un tío de la fallecida, que la había criado y a quien ella consideraba como su padre. El lugar del homicidio se trata de una zona donde predominan las casas de campo y adonde se accede por una carretera que carece de arcén, por lo que las víctimas tenían que transitar por mitad de la calzada.

Después del suceso, el conductor del vehículo intentó ayudar a los heridos en vano, según relataron los testigos en su momento. Aparte de la pena de cárcel, el Juzgado de lo Penal número 5 ordena que al acusado se le retire el carné de conducir durante el tiempo de la condena. En el momento de producirse el doble atropello, el acusado estaba obligado a portar en el vehículo que conducía la "L" de conductor novel, ya que aún no había transcurrido un año desde que obtuvo el carné. El suceso produjo una gran consternación en Lucena, de donde eran la familia de la mujer y el bebé fallecidos.