Claves para un dulce sueño

Quién no se ha levantado más de un día con la sensación de no haber descansado nada, a pesar de acabar de pasar ocho horas durmiendo. Normalmente, se piensa que el problema es del colchón, de la almohada o de una mala postura. Y, aunque pueda ser por ello, también el problema puede radicar en hábitos diarios que las personas no relacionan con el sueño. Éste es el objetivo de Aprender a Dormir, un programa innovador puesto en marcha por el grupo hotelero Hospes Infinite Places, en el que los clientes aprenden una serie de recomendaciones necesarias para evitar el estrés durante el día, así como para generar un buen sueño durante la noche.

Las previsiones apuntan que este programa científico llegará próximamente al establecimiento hotelero que la cadena tiene en la capital cordobesa, Hospes Palacio del Bailio. Según su responsable de Ventas y Marketing, Marta Aguilar, la filosofía del hotel siempre ha estado centrada en conseguir una estancia agradable para el cliente y en la que el descanso esté totalmente garantizado. Para ello se cuidan todos los detalles, como la estética de todas las estancias (siempre decorados con colores relajantes), la calidad de los colchones o la composición de las sabanas.

Con esta iniciativa única en el mundo, desarrollada en colaboración con la Sociedad Española del Sueño, el cliente participa a lo largo de cuatro días -extensibles a una semana- en varias actividades encaminadas a conseguir ese descanso reparador, así como pautas y hábitos saludables. A través de estos consejos, el paciente aprende qué pequeños detalles de su vida diurna debe cuidar para conciliar el sueño de una manera óptima. Todo este proceso se realiza a partir de un diagnóstico inicial, realizado por un médico especialista. A partir de sus conclusiones se le recomendará al huésped una serie de cambios en sus hábitos de alimentación para que el cuerpo reciba los nutrientes necesarios, y en técnicas de relajación y masajes para alcanzar el máximo nivel de bienestar. Incluso, el especialista realiza un estudio a través de un polisomnógrafo, un aparato de última generación que permite estudiar diferentes parámetros fisiológicos mientras el huésped duerme en una de las habitaciones del hotel. Varios estudios científicos han demostrado que dormir mal no sólo afecta al cansancio. También tiene otras consecuencias como irritabilidad, mal humor, pérdida de concentración y de memoria, bajada de las defensas, o mayor riesgo de depresión. Y es que el descanso es fundamental para que tanto el cuerpo como la mente respondan a la perfección durante las 24 horas del día.