El confinamiento por el decreto de estado de alarma y la situación social causada por el coronavirus han servido de inspiración al escultor cordobés José Manuel Belmonte, que en estos poco más de dos meses ha creado una nueva obra, un imponente dios Pan que se suma a su serie Custodios.

En cada centímetro de esta obra, Belmonte ha plasmado los sentimientos y sensaciones vividas tanto por él como por millones de personas en esta pandemia que a su paso está dejando muerte, caos y familias desesperadas al no tener ingresos.

La palabra "pandemia" procede del vocablo griego "pan", que significa "todo" y que a su vez daba nombre a un dios temido y rechazado "porque traía todas las plagas y miserias", explica el artista cordobés. La idea surgió a raíz de un artículo que leyó en prensa durante el confinamiento y en el que se explicaba la historia de este mito griego.

Entonces, cogió de su taller unos palillos de modelar y un pegote de barro, los llevó a su casa y empezó a crear. Allí solo trabajó la cabeza porque en su vivienda no hay sitio para más al ser sus esculturas de grandes dimensiones. Esta, por ejemplo, mide 2,20 metros de altura. Cuando el Gobierno permitió que los autónomos volvieran al trabajo, se fue a su taller para hacer el cuerpo, cuya idea ya tenía pensada.

Con este majestuoso dios Pan, Belmonte quiere representar "esos sentimientos que nos han rondado durante la pandemia; era casi ciencia ficción lo que estábamos viviendo y no terminábamos de creérnoslo". Aparte, le impactó cómo crecía el número de fallecidos, los contagios, la falta de medios de los sanitarios y la situación de las residencias de mayores.

José Manuel Belmonte mira a su dios 'Pan' en su taller.

Todo ese "caos que trae Pan, ese lecho de muerte que ha dejado en todo el Mundo", ha querido reflejarlo en su obra. Por eso representa al personaje "con una actitud airosa y desafiante, con mirada muy dura y cruel" para significar que en ese momento "era él quien mandaba porque todos hemos estado a expensas del covid-19".

La escultura lleva un cráneo en la mano y la peana sobre la que se alza es similar a un calvario, con huesos humanos y una especie de collage con recortes de periódicos a nivel internacional que hablan sobre el coronavirus para "reflejar ese momento que estaba viviendo".

"Siempre he pensado que para un artista el mejor psicólogo es el arte, a través de mi obra canalizo todos los sentimientos", confiesa Belmonte, que recuerda a grandes artistas que representaron momentos históricos como Goya con Los fusilamientos o Picasso con el Guernica.

En esa línea, pensó que "tenía que dejar constancia de este momento" y se decidió a hacer esta obra que "quizás no es muy agradable, pero refleja la realidad, lo que hemos sentido todos en el confinamiento, esa angustia y desesperación de no poder hacer nada", señala.

Pan lleva en la parte delantera de su túnica una luna y en la espalda un sol como una alegoría del Remedio de Ánimas. "Conforme avanza, nos mete en las tinieblas, en la oscuridad, pero tras su paso se abre la luz, que sería el momento de desconfinamiento en el que estamos ahora", explica el artista cordobés.

Esta nueva escultura está incluida en la serie Custodios, de la que ya forman parte otros personajes  mitológicos como Orión, Hades o Hela.