El Ayuntamiento de Córdoba pedirá al Gobierno la designación de una autoridad competente para registrar la solicitud ante la Unión Europea (UE) de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) de productos artesanales e industriales para la joyería cordobesa, un sello de calidad parecido al de las denominaciones de origen del sector agroalimentario. El Pleno del Consistorio ha aprobado para ello una moción que en principio era del PP y que ha sido suscrita también por el resto de los grupos que conforman la Corporación municipal.

En la sesión ha intervenido la presidenta de la Asociación Provincial de Joyeros, Plateros y Relojeros de Córdoba San Eloy, Milagrosa Gómez, quien ha "contextualizado" la petición con una serie de datos de la Junta de Andalucía. Gómez ha destacado que "la joyería es el sector industrial más importante de la ciudad de Córdoba, por su historia, su tradición, su arraigo, su calidad y por su peso específico en la estructura productiva".

Para continuar insistiendo en que "del total de los establecimientos de la industria joyera en Andalucía, más del 80% se concentra en la ciudad de Córdoba, en la que se contabilizan más de 1.300 empresas, de las que el 96% son pymes con menos de diez personas empleadas". También basándose en esos datos ha referido que la ciudad de Córdoba concentra el 60% de la producción joyera nacional.

En concreto, por la moción conjunta el Ayuntamiento insta al Gobierno de España a que "designe cuanto antes" a la autoridad competente "que deberá establecer los procedimientos administrativos y de condiciones para la admisión de solicitudes y así la Asociación Provincial de Joyeros, Plateros y Relojeros de Córdoba San Eloy pueda presentar en 2025 la solicitud para que la joyería de Córdoba sea registrada como  Indicación Geográfica Protegida de productos artesanales e industriales de la Unión Europea", tal y como la leído el alcalde, José María Bellido.

Tal y como ya destacó la presidenta del Instituto Municipal de Desarrollo y Empleo de Córdoba (Imdeec), Blanca Torrent, la IGP se trata de una distinción que proporcionará, dentro del sector de la joyería en este caso, mayor seguridad al consumidor por su distintivo de autenticidad y una mayor defensa para las empresas frente a falsificaciones y a la competencia desleal, además de un diseño de calidad e innovación que permitirá hacer más reconocida todavía a la joyería cordobesa a nivel europeo y mundial. 

"Nosotros hemos hecho los deberes tanto por parte de la Asociación San Eloy como por parte del Ayuntamiento, ahora le toca actuar al Gobierno de España para que decida si es importante para él la joyería de Córdoba, su tradición artesanal y artística y los pequeños autónomos y micropymes que la mantienen", recalcó.