"Estamos en mendicidad permanente". Así de contundente se ha mostrado el presidente de la Audiencia Provincial de Córdoba, Francisco de Paula Sánchez Zamorano, en la presentación de la memoria anual 2022 del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) en la Ciudad de la Justicia de la capital cordobesa.

Sánchez Zamorano ha reconocido en la presentación de los datos que un año después "es más de lo mismo, no se termina de implantar la Oficina Judicial, ni llegan las reformas procesales llegan, y la organización territorial tampoco se concreta en algo positivo". 

El titular de la Audiencia ha vuelto a poner de manifiesto las necesidades de las que adolece el sector de la Justicia en Córdoba y ha subrayado que, al menos, en el caso de la capital hacen falta 7 u 8 magistrados más, mientras que a nivel provincial son necesarios entre 14 o 15 funcionarios más.

"Todo funciona por el voluntarismo de los jueces, de los funcionarios y todos los que formamos parte. Los jueces soportan una carga de trabajo un 50% superior; todo han sido parches y seguimos en la mendicidad", ha subrayado. Como ejemplo, ha citado que "para conseguir una comisión de servicio hay que hacer numerosos escritos e informes antes de conseguir una plaza".

También ha recordado que en el caso de la aplicación de las nuevas tecnologías en el ámbito judicial "queda mucho camino por hacer, sobre todo en la implantación de los expediente judiciales porque seguimos con papel físico; el papel cero es un desiderato".

Juzgado de violencia sobre la mujer

De la memoria, Sánchez Zamorano ha destacado el incremento en los casos que han entrado en el juzgado de violencia sobre la mujer, que ha sido el más elevado. En concreto, ha indicado que a lo largo de 2022 se han registrado 3.588 asuntos, 500 más que en 2021. De todos ellos, 2.235 son de la capital, mientras que en la provincia la suma es de 1.353.

En este punto ha recordado que el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) fija en 1.600 el módulo razonable de causas, al tiempo que ha destacado que el juzgado "funciona por la extraordinaria labor de la jueza titular, con jornadas que acaban a las 17:00 o las 18:00".

Otro de los aspectos que ha destacado es que a lo largo del pasado ejercicio se han adoptado 333 órdenes de protección, un 80% de las incoadas, al igual que el incremento hasta el 80% -frente al 60% de 2021- de las sentencias condenatorias que se han dictado en este ámbito. 

En el caso del juzgado de menores ha hecho especial hincapié, en que "siguen aumentando las causas en el ámbito de los menores", que en concreto, se han incrementado en un 13%. "Los menores repiten los comportamientos de los mayores y hay mucho que hacer en educación", ha reflexionado.

En el caso del aumento del 20% de las sentencias, Sánchez Zamorano ha recordado que se trata de "un dato objetivo que hay que analizar porque la profesionalidad -de los titulares judiciales- está por encima de todo". "Habría que ver la evolución y puede ser un dato coyuntural. Las declaraciones convencen a las jueces y nada más", ha insistido. 

Datos estadísticos

A lo largo del año pasado, según recoge la memoria del TJSA, la carga de trabajo de los juzgados de instrucción de Córdoba ha subido. Así, de los 26.600 asuntos registrados en 2021 se ha pasado a los 27.600 en 2022.

Por su parte, en el ámbito civil los casos han disminuido, "pero los jueces de primera instancia soportan una carga superior a la permitida", ha alertado Sánchez Zamorano. Y es que el CGPJ, establece la media de asuntos en 1.200 anuales y en el caso de Córdoba se elevan a 1.700, por lo que "harían falta tres o cuatro juzgados de primera instancia". 

La sección civil, por su parte, también está "sobrecargada" y, según ha detallado, la bolsa de asuntos es de 1.589, "una cifra que me preocupa por la dilación de los señalamientos".