“Si tienes más de 65 años, estás embarazada, padeces una enfermedad crónica o eres profesional sanitario, vacúnate contra la gripe”. La campaña de vacunación contra la gripe de este año, promovida por la consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía, arrancó el lunes con 135.100 dosis para la provincia de Córdoba, 13.060 menos que el año pasado.

Según los datos de la consejería, el número de dosis ha incrementado un 15% respecto al ejercicio anterior en el conjunto de Andalucía; sin embargo, en Córdoba esta no parece ser la realidad, pues hay un déficit del 9,63% con respecto a la campaña del 2018. En la campaña intervienen un total de 135 centros de salud y 13 privados.

Aunque hay menos dosis, este año la campaña está dirigida a un grupo de beneficiarios más amplio gracias a la inclusión, como novedad, de los menores de entre seis y 24 meses con antecedentes de prematuridad menor de 32 semanas de gestación, las personas con trastornos de la coagulación y los profesionales que trabajen en oficinas de farmacia.

Así, los ciudadanos beneficiarios de estas vacunas son todos a partir de los seis meses de edad, con especial atención a las personas mayores de 65 años, embarazadas independientemente del tiempo de gestación, personas que padecen enfermedades crónicas de riesgo y aquellos que están en contacto con ellas y algunos colectivos profesionales como trabajadores de centros sanitarios, fuerzas de seguridad e incluso personas cuidadoras.

Salud y Familias va a utilizar tres vacunas de tipo trivalente, con dos cepas de influenza A y una influenza B, además del neumococo con la vacuna Prevenar 13, que es una nueva incorporación a la vacunación del adulto desde mayo 2019 en Andalucía.

En el centro de salud Córdoba Centro, en la avenida de América, comenzó la campaña con al menos siete personas, que previamente pidieron cita, esperando para vacunarse. Es el primer año que María Baena de 69 años se vacuna contra la gripe, pero su marido sí lo hace todos los años y le ha ido bien. “A mí me lo ha recomendado el médico por mi edad, pero también por el contacto que tengo con mis nietos”, dijo Baena.

En la fila también estaba Ángeles Moreno Moya, de 73 años, quien se vacuna desde hace muchos años por padecer diabetes tipo 1; sin embargo, su marido y su hija de 54 años también lo hacen, por prevención, desde muy jóvenes. Ángeles lo considera una responsabilidad civil.

La Junta recomienda la vacunación durante los meses de octubre y noviembre y anualmente, pues el virus tiende a mutar cada año, aunque la campaña se extenderá desde otoño hasta febrero del 2020.