Con Cuchillo y Tenedor

Muffins a la taza, una receta para hacer (y degustar) con los más pequeños

Muffins a la taza, una receta para hacer (y degustar) con los más pequeños

Muffins a la taza, una receta para hacer (y degustar) con los más pequeños

Existen muchos placeres culinarios que llevar a cabo cuando llega el otoño. Comerte un muffin calentito en una tarde lluviosa mientras el olor del chocolate impregna las habitaciones es uno de ellos. Los muffins son uno de los dulces más sencillos y rápidos que existen, pero aunque pueda parecer que hacer un muffin no tiene mucho misterio y sólo es mezclar los ingredientes en un bol y calentarlo todo, conseguir un buen bizcocho, con un interior jugoso y esponjoso, requiere de ciertas técnicas previas y posteriores al horneado. Los muffins son uno de los postres preferidos de los más pequeños, que disfrutan tanto preparándolos como comiéndolos. Lo normal es hacerlos en un molde y en ocasiones ese molde puede ser una taza. Aquí os explicamos cómo hacer muffins a la taza, un receta para hacer (y degustar) con los más pequeños.

Los ingredientes que necesitamos para prepararlos son los siguientes: Cuatro cucharadas de azúcar moreno, dos cucharadas de cacao en polvo, dos cucharadas de huevo batido, tres cucharadas de leche, tres cucharadas de aceite de girasol y dos cucharaditas de chips de chocolate.

Para preparar los muffins necesitaremos azúcar moreno, cacao en polvo, huevo batido, leche, aceite de girasol y chips de chocolate

¿Cómo preparar muffins a la taza? Se trata de poner todos los ingredientes en una taza y removerlos. Es importante llenar sólo dos tercios de la taza para permitir que una vez se caliente el bizcocho tenga margen en la taza para coger volumen. Una vez mezclados bien los ingredientes, se introduce la taza en el microondas durante 3 minutos a máxima potencia y posteriormente se deja roposar diez minutos para que la masa adopte su forma natural.

Claves para hacer un muffin delicioso

Para hacer un buen muffin es importante elegir la grasa adecuada de la mezcla. En este caso usaremos aceite de girasol, que va a conseguir que el muffin quede jugoso y va a aportar gran parte de su sabor. Los muffins deben hacerse en un molde duro, para que mantengan bien la forma, preferiblemente de metal para que se caliente más y dore bien las paredes, por lo que si tuviéramos la opción optaríamos por una taza que tenga esas prestaciones.

Por último, los expertos recomiendan no mezclar los ingredientes secos con los húmedos hasta que lo vayas a calentar. Y hacerlo con una cuchara (nunca con varillas) ejecutando movimientos envolventes. Incluso hacerlo en dos tantas si fuera necesario, pero dedicándole el tiempo suficiente para conseguir que el producto quede perfectamente ejecutado..¡Y listo para comértelos de una tacada!

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