"Ni en el mejor de nuestros sueños podríamos pensar que las cosas saldrían así. La realidad ha superado ampliamente nuestras expectativas". Quien así habla es un agente de la propiedad inmobiliaria, intermediario en distintas operaciones de alquileres de comercios en la zona centro. Y se refiere a Cruz Conde, una calle que, según los operadores consultados, ya se cotiza más cara que el eje Gondomar-Concepción, que se convirtió en los años 80 -a raíz del cierre de la circulación- en la milla de oro de las tiendas de la capital. Según su relato, la conclusión de las obras y el incremento de actividad que se ha notado ha derivado en un fuerte interés de las franquicias por instalarse en una zona, Cruz Conde y su entorno inmediato, que hasta hace pocos años estaban dando de lado ante la falta de atracción de público.

Es difícil hablar de precios concretos. Cada local, dicen los intermediarios, es un verdadero mundo. Depende del número de metros, de cómo se encuentre el local, de los metros de fachada (y, por ende, de escaparate), así como de las necesidades de espacio del nuevo inquilino y de las inversiones que tenga que realizar para poner en marcha el nuevo negocio. Se da un dato de referencia, que no es exhaustivo: 5.000 euros de alquiler por cada 100 metros cuadrados de local.

Cruz Conde, dicen en el sector, es una calle bastante compleja para la llegada de nuevas enseñas. La razón, se explica, es que es una vías donde los locales medios o grandes no abundan precisamente porque ha estado ajena a la dinámica tradicional de implantación de franquicias, que se centraron en Gondomar y Concepción. En el sector se comenta el caso de una compañía textil que se implantó recientemente en la céntrica calle. Necesitada de espacio, adquirió los locales anexos y, como aún no tenía suficiente, ampliaron el negocio a la primera planta del edificio. Se asegura que la tienda total roza los 1.500 metros cuadrados de superficie.

Una de las curiosidades del negocio es que no solo se han disparado los alquileres a raíz de la realización de la obra de reforma de la calle. También se han disparado los abonos de traspasos, que recibe el negocio que deja el local comercial. Con los inicios de la crisis económica, los traspasos se redujeron sustancialmente y, en muchos casos, se dejaron de pagar. Los agentes consultados asegura que este concepto ha vuelto con fuerza y ahora forma parte relevante de la operación. El reparto de esta cantidad depende de la letra de cada contrato aunque lo habitual es que el 80% lo perciba el empresario que deja el local y el 20% se quede en la propiedad. En el sector se asegura que, excepcionalmente, se han llegado a pagar 600.000 euros por este concepto contractual.

La realidad es que buena parte de los locales de las nuevas empresas comerciales que han llegado al centro lo han hecho de la mano de negocios que tuvieron que echar la persiana por efecto de la crisis económica. Ahora, se está producido otra modalidad de rotación. Los negocios que se encuentran en un local comercial no generan recursos suficientes por medio del negocio ordinario para poder renovar los contratos de alquiler ante las ofertas que reciben los propietarios de los mismos. Por su parte, los comerciantes que son propietarios de sus locales comerciales están recibiendo ofertas sustanciosas para que los alquilen, por lo que no les compensa seguir con el negocio tradicional. Lo advierten fuentes de este mercado. Algunos de los cierres recientemente conocidos de comercios señeros de la capital son, en realidad, traspasos producto de buenas ofertas inmobiliarias que han llegado a la propiedad de esos edificios.

La opinión general es que el incremento de interés en torno a los locales de Cruz Conde excede con mucho las aceras de esta vía y llega a calles cercanas que se están aprovechando del interés inmobiliario generado por la reforma de la zona.

Un agente consultado asegura, por ejemplo, que en los últimos meses se pueden haber realizado unos 60 contratos sobre locales ubicados en el entorno de tanto sobre bajos que estaban cerrados como por negocios que han decidido cambiar de ubicación.

Los intereses de la propiedad se encuentran alineados claramente con los empresarios del comercio, que han reclamado la peatonalización completa en la línea de lo reclamado durante la precampaña y la campaña electoral por el Partido Popular, que ahora en el gobierno se haya en medio de grupos sociales que tiran para ordenar la zona de la forma que más les conviene. Desde este sector, se considera que, a más peatonalización que se lleve a cabo en el diseño definitivo del tráfico, mayor será también el interés de las empresas por radicarse en la zona. Frente a esta visión , los vecinos del entorno de Cruz Conde y los intereses de Aucorsa aprietan para que el plan de movilidad -que, en realidad, afecta a toda la zona Centro- no impongan un cerrojazo a los vehículos a motor aunque ello tenga lugar a determinados horarios que no colisionen con el comercio.

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