ars palma naranja: Manu López; David García (6), Lubo Vermirovsky (5), Dublino (7), Fandiño (2), Javi García (2) y Dani Hernández (2) -siete inicial-, Felipe (1), Morales, Montesinos, Nilo, Pedro Mota (1), Jesús Martínez y Juan Antonio. Ángel Ximénez: Sotelo; Olea (4), Liébana (1), Javi Jiménez (2), Simón, Guirado (2) y De la Sierra (6) -siete inicial-, Cano (3), Molina (1), Morales, Ollero (2), Chirosa y Paco García. Árbitros: Guillena y Jiménez (Sevilla). Excluyeron a los palmeños Felipe, Dublino y Fandiño y a los pontanos Olea, Guirado y De la Sierra. Parciales: 4-1, 6-3, 8-6, 11-8, 11-10, 14-12, (descanso), 15-12, 18-15, 20-17, 21-17, 23-19 y 26-21. Incidencias: Partido correspondiente a la vigesimocuarta jornada en la División de Honor Plata disputado en el pabellón El Pandero ante la presencia aproximadamente de unos 800 espectadores, muchos de ellos llegados desde Puente Genil.

Imparable. El Ars sigue dando mucha guerra y mantiene sus esperanzas de estar en el play off por el ascenso a la Liga Asobal. Los palmeños se deshicieron en el derbi cordobés de un Ángel Ximénez que ve cómo sus opciones de permanencia se complican con este revés y el triunfo del PAN Moguer ante el Barakaldo. Por su parte, el conjunto de César Montes mantiene su cuarta plaza y se acerca al líder, el Puerto Sagunto, que ayer cayó frente al Prasa Pozoblanco.

Los de la Vega, pronto, tomaron una ligera ventaja en el marcador. A pesar de que los de Luja Chirosa intentaban recortar las distancias, el Ars siempre fue por delante en el luminoso. Y es que el cuadro pontano sabía que sacar tajada de El Pandero era muy difícil -sólo el Huesca se ha llevado el triunfo de Palma del Río-. Aún así, a falta de cinco minutos para el final de la primera mitad, los de Puente Genil se colocaron a uno de los palmeños. Las espadas estaban en todo lo alto para la segunda mitad.

No obstante, tras el receso, el cuadro de César Montes puso de nuevo una ligera ventaja en el marcador, que no soltó ya a lo largo de una segunda mitad, en la que los palmeños tuvieron que sudar más de lo esperado para deshacerse de un voluntarioso Ángel Ximénez y alzarse así con una victoria que mantiene vivo un gran sueño.