Con el equipo situado en posiciones que le estaban vedadas desde hace muchos años, la afición en proceso de reconciliación y los focos de los medios colocados sobre este emergente Córdoba, Carlos González está echando el resto en su particular cruzada para convencer al mundo de que ahora es el momento de unir las fuerzas. "Estoy empeñado en que todos se impliquen en este proyecto porque si no es así nunca podremos ser grandes. Hay ciudades que se han involucrado a fondo y han llevado a sus clubes hacia arriba", declaró el presidente en la tertulia deportiva de Onda Cero, a la que asistió como invitado para desgranar sus sensaciones sobre la actualidad blanquiverde y, sobre todo, sus planes para conseguir el despegue de un Córdoba que, según insistió, "no es de Carlos González, sino de la ciudad".

"Yo sólo soy un gestor", explicó el mandatario, que ayer visitó la Diputación Provincial para dar forma a un acuerdo con una institución que tradicionalmente ha colaborado con la entidad y en la que el tinerfeño detectó "una buena disposición". Esos contactos se unen a los que en los últimos días ha mantenido González, junto a su vicepresidente y consejero delegado Javier Jiménez, con el Ayuntamiento de Córdoba. Durante la semana pasada se escenificó la buena sintonía que existe entre el club y el consistorio. El alcalde, José Antonio Nieto, acudió a El Arcángel para adquirir entradas y apoyar la campaña blanquiverde de captación de público. El domingo estuvo con González presenciando el encuentro ante el Villarreal B desde la grada. El mandatario futbolístico confiesa que tiene "un buen feeling" con el primer edil cordobés, y si bien admite que es consciente de que las circunstancias económicas "son muy complicadas", espera que fructifiquen algunas iniciativas a propósito de la gestión comercial de varios espacios del estadio El Arcángel.

El rutilante presente deportivo del equipo de Paco Jémez ha encandilado a una afición que ha mutado su desencanto por un brote de esperanza. A González no le sorprende en absoluto la marcha del Córdoba. Es más, desveló a lo largo del encuentro con los periodistas que lo tuvo claro "desde el partido de pretemporada ante el Hércules, al que le ganamos en su casa por 2-1 haciendo un gran fútbol". "Ahí nos dimos cuenta de lo que iba a ser el Córdoba esta temporada", indicó el presidente, quien piensa que "lo mejor está por llegar" en un equipo que ha enlazado seis jornadas -cinco de Liga y una de Copa- sin perder, tras el empate ante un Villarreal "extraordinario, con futbolistas que valen dos y tres millones de euros". "Desde el primer minuto prometimos sólo dos cosas: ilusión y buen fútbol. Creo que estamos cumpliendo", afirmó González, quien lleva como "algo lógico y normal" las expectativas que ha creado el equipo y la revalorización de sus jugadores.

"¿Ofertas? Ninguna. Pero si viene el club que sea y nos paga un precio razonable, el que nosotros entendemos que valen nuestros futbolistas, pues yo los vendo. Eso lo tengo clarísimo y lo digo alto porque es lo que hace todo el mundo: el Valencia, el Sevilla, el Atlético de Madrid... Cualquier club de España y del mundo. ¿No vendió el Manchester a Cristiano Ronaldo al Madrid? Estaríamos locos si no lo hiciésemos. Hay que vender para poder comprar", explica el empresario tinerfeño, quien recalca que "el Córdoba no es un negocio" para él y que su principal pretensión es "hacerlo rentable". "Pero no para Carlos González, sino para el propio Córdoba. Tiene que vivir de sus ingresos, no puede estar esperando a que venga alguien a poner el dinero. Yo quiero que el Córdoba sea capaz de subsistir por sí mismo y para eso hay que tomar una serie de medidas, una de las cuales es vender futbolistas. Si llegan ofertas las estudiaremos todas. Y si se estima que son interesantes, se aceptarán por cualquier jugador", matizó.

El buen papel que están realizando jóvenes como Javi Patiño o Javi Hervás no está pasando desapercibido para algunos clubes de superior categoría. Según González, quien quiera llevarse a Hervás "tiene que poner tres millones de euros", pese a que el joven talento cordobés tiene un contrato amateur. "Lo que tiene que gustarle a Córdoba es que haya quien se interese por los jugadores de su equipo. Lo lamentable sería que no nos llamaran", justifica el presidente, quien dice que en la actualidad sólo se está tratando la renovación de Charles. "Es un tema que ya desde el verano se viene tratando y tiene la propuesta en la mesa. Cuando llegó el Almería tomamos la decisión de no traspasarle porque entendimos que no íbamos a beneficiar a un contrincante nuestro y, además, sin conseguir el dinero que pedíamos por él. Ahora bien, si nos hubieran pagado lo que pedíamos, Charles estaría vendido".