Centenares de personas respondieron ayer a la llamada del Frente Cívico Somos Mayoría (FCSM), liderado por el histórico dirigente de IU Julio Anguita, que pretende que los líderes de la izquierda española marquen unas líneas de trabajo, dejando de lado los símbolos políticos. El encuentro, tal y como su título indica ¿Qué hacer en la actual situación política, económica y social?, busca la "unión" para ofrecer una visión "global de sintonía" y hacer ver a la ciudadanía que es posible llegar a una "nueva situación".

La clave para alcanzar esta meta, tal y como aseguró ayer Anguita ante un abarrotado salón de la Facultad de Ciencias del Trabajo, está en la "rebelión democrática y pacífica, en nombre de principios legales que el poder económico y el Gobierno no están cumpliendo". De este modo, según el líder del Frente Cívico, se empezaría a cumplir la Constitución, "que ellos -aludiendo al poder económico y el político- no la cumplen". Con esta idea de base, consiguió sentar en una misma mesa al promotor de Podemos, Pablo Iglesias, el portavoz de EQUO, Juantxo López Uralde, y la integrante del Consejo Federal de IU Tania Sánchez.

Las Marchas de la Dignidad, que confluirán desde distintos puntos de España el próximo 22 de marzo en Madrid, según Anguita, marcarán un "antes y un después" y "pueden ser algo que constituya un hito", en función de lo que ocurra después. Para conseguir resultados, el líder del Frente Cívico insistió en que "hay que darle continuidad" para que "no sea acción de un día", pues se trata de "intentar demostrar a los poderes político y económico que hay algo que se llama dignidad", lo cual ha hecho, históricamente, "que mucha gente se mueva", a partir de "ideas nobles". Pero, ante todo, Anguita destacó que hay que dar pasos de una forma "tranquila y pausada", a pesar de que "cuanto más urge una solución más tranquilo hay que ir". Así, comparó a la política como un arte agrario en el que el agricultor debe "desbrozar las tierras, ararlas, regalar para luego recoger los cereales".

El germen de la movilización, según Anguita, ya es palpable, puesto que en estos momentos España se sitúa a la cabeza de los países europeos con "todo tipo de mareas, protestas e, incluso ocupación de centros abandonados", como es el caso del colegio Rey Heredia.

El politólogo Pablo Iglesias se mostró muy contento de poder participar en un encuentro como el organizado por el Frente Cívico en el que "se permite cambiar el guión", haciendo referencia a las tertulias en las que participa donde "las cartas están marcadas", y poder "hablar de política en mayúsculas". De este modo, destacó que en estos momentos lo más importante es anteponer la "democracia" a la "dictadura", buscando la "unidad popular" en torno a "los derechos humanos, los derechos sociales" e incluso de ideas básicas como "la libertad, igualdad y fraternidad". López de Uralde, por su parte, lamentó que en política "se habla muy poco", excepto en las campañas electorales", por lo que alabó que en el foro "se discuta a calzón quitado qué es lo que nos une y dejar a un lado lo que nos separa. La diputada de IU en la Asamblea de Madrid, por último, consideró necesario poner de una vez por todas freno a la crisis y usar para ello el "hueco del sentido común de la gente" y apostó por conseguir que los políticos salgan de los despachos para crear espacios de cotidianidad "donde las personas sean las verdaderas protagonistas".