La piscina de agua de manantial en el corazón de la Campiña donde refrescarte y comer de lujo

Viajar a la localidad cordobesa de Monturque merece la pena para darse uno de los mejores chapuzones de la temporada en la piscina de El Cañuelo (Carretera N-331 km 60, 200, 14930 Monturque), un complejo compuesto por varios alojamientos y un restaurante chuletero cuya especialidad son las brasas. Rodeado de un relajante entorno natural, sin duda, es uno de los secretos mejor escondidos de la Campiña Sur cordobesa, aunque lleva abierto más de tres décadas.

Sus piscinas -también hay una para los más pequeños de la casa- aprovechan las aguas de un manantial de donde antiguamente se obtenía la sal común. Fue así hasta que el negocio dejó de ser rentable años atrás. El recinto, de 7.000 metros cuadrados, tiene una capacidad de 750 personas.

La piscina abre de martes a domingo de 12:00 a 20:00 .

Los usuarios del complejo disponen de un merendero y una extensa zona verde donde no falta la sombra y se puede disfrutar del que procuran viejos chopos, álamos negros, acacias, chaparros, moreras y alcornoques.

Y a la hora de reponer fuerzas, tampoco falta en El Cañuelo un chuletero con brasas a base de carbón de encina. "En El Cañuelo, ofrecemos un homenaje a la cocina tradicional, destacando los sabores de la región con ingredientes frescos y locales. Cada plato refleja el compromiso de mantener vivas las recetas autóctonas, desde nuestras irresistibles chuletillas de cordero hasta otros cortes a la brasa que conquistan a cada comensal", señalan desde su web.