Sergi Martínez es uno de los pilares del Girona Basquet, el rival que llega este sábado al Martín Carpena. El alero de Rubí (1999) está cedido en el club catalán desde el Barcelona, donde en las últimas temporadas había tenido protagonismo discontinuo con Saras Jasikevicius. Tuvo épocas en las que parecía consolidarse como un jugador importante en la rotación (sobre todo en la temporada 2021/22), pero no llegó a hacerlo. La salida del lituano también llevó aparejada la suya tras una campaña con menos protagonismo. Y en Girona está teniendo ese amplio minutaje que todos buscaban. Aún sin cumplir los 25 años, es uno de los jugadores españoles que más minutos juega por partido en toda la competición, con 26:26 por duelo. Con sus 2.02 metros y su capacidad defensiva y reboteadora, es el típico jugador que no es deslumbrante pero sí del gusto de los entrenadores por lo que da en el otro baloncesto. Promedia 5.9 puntos (52% en tiros de dos, 29% en triples y 68% en libres), 6.1 rebotes y 9.5 de valoración.

Sergio Scariolo le hizo debutar con la selección absoluta, en inferiores fue un clásico de las medallas. El salto en su juego pasaba por un paso más ofensivamente, donde una falta de fiabilidad en el tiro de tres le ponía tope. Pero, con sus limitaciones, está demostrando que puede ser un jugador importante en ACB. El jugador catalán y Stefan Djordjevic visitaron el Campus Baloncesto Girona antes de entrenarse con el primer equipo a las órdenes de Fotis Katsikaris con la visita al Unicaja este sábado en el horizonte. “Puedes ganar a cualquiera y perder con cualquiera, vamos a Málaga a ganar ya dar nuestra mejor versión”, decía el catalán en el 9 Esportiú antes de montarse este viernes en el avión para venir a la Costa del Sol.