¿Cómo evitar el espionaje por webcam?

Si hay algo que preocupa actualmente a los usuarios de ordenadores, móviles o tablets es, sin duda, la seguridad de su dispositivo. Existen medidas básicas de seguridad informática para proteger tanto tu empresa como tus datos personales y diferentes sitios por donde pueden colarse los hackers. Uno de ellos es la webcam, herramienta que nos permite estar en contacto con amigos, familia y compañeros. Indispensable en los meses más duros de pandemia, pero también puerta de entrada para espías y estafadores. ¿Cómo evitar el espionaje por webcam? Aquí os lo explicamos.

Ojo con tu webcam, podría estar hackeada. Cualquier tipo, tanto exterior como integrada, como desde cualquier soporte (portátiles o teléfonos) pueden caer en manos extrañas para poner en riesgo nuestra seguridad, consiguiendo acceder al visionado de lo que ocurre en negocios y hogares, observando el salón de tu casa, locales repletos de mercancías o cámaras de videovigilancia.

Consejos para usar correctamente la webcam

Para ponerle freno a este tipo de espionaje los expertos ofrecen consejos para un uso seguro de la webcam y determinadas técnicas que le dificulten la labor a aquellos que pretenden usar un bien para hacer el mal.

La primera de las medidas que podemos llevar a cabo para tener la webcam a salvo de los mirones es taparla o desactivarla cuando no la usemos. Desde colocarle algo por encima a ponerle una pegatina puede valer, aunque en este caso el tema del sonido se mantendría habilitado.

En segundo lugar es muy importante usar siempre un sistema antivirus actualizado y comprobar que el cortafuegos está activado. Usar el ordenador y tenerlo encendido durante días sin asegurarnos de que tiene los programas necesarios instalados para hacerlo de forma segura allana siempre el camino de aquellos que quieran buscarle las cosquillas a nuestro sistema.

En tercer lugar sólo tenemos que usar la webcam cuando estemos conectados a una red de Internet segura. O lo que es lo mismo. Nada de hacer videollamadas enchufados a la red wifi de cualquier local público.

También es importante mantener actualizados el sistema operativo, el navegador y el software y nunca pinchar en esos típicos enlaces que nos mandan por correos o sms porque podríamos estar siendo víctimas de los diferentes tipos de phishing que existen (cada vez más sofisticados). Únicamente responder a fuentes de confianza, comprobadas en la dirección de envío, y sospechar siempre que nos reclamen descargar cualquier tipo de archivo adjunto.