Causa criminal

Un trozo de pulmón y un cadáver desaparecido: comienza el juicio por la muerte de Romina

Imagen del presunto homicida

Imagen del presunto homicida / Adriel Perdomo (EFE)

El juicio por la muerte de Romina a la que presuntamente asesinó su pareja, Raúl Díaz, en 2019, tendrá lugar hoy, 2 de junio, en Las Palmas.

Tras la conformación del tribunal de jurado la primera declaración será la del acusado. Después será el turno de los testigos y periciales. Está previsto que la vista oral se prolongue hasta el 16 de junio, con sesiones diarios. Según ha informado la abogada de la víctima, Emilia Zaballos, la madre de Romina Celeste, residente en Paraguay, ya se encuentra en Gran Canaria para seguir el juicio.

El acusado, que sigue manteniendo que encontró a su pareja muerta y decidió descuartizarla y hacerla desaparecer está acusado de maltrato habitual, homicidio y de profanación de cadáver y simulación.

La Fiscalía pide para el acusado 20 años y 11 meses de cárcel además de una indemnización de 300.000 euros para los dos hijos de la víctima. Además, el Instituto Canario de Igualdad (ICI) que se ha personado en la causa como acusación, solicita que se le juzgue por un delito de asesinato en lugar de homicidio, lo que elevaría la pena a 30 de años de prisión y 350.000 euros de compensación a la familia de Romina.

La acusación pública defiende, sin embargo, que puesto que no se encontró el cuerpo de la mujer, solo un trozo de su pulmón, no se puede saber cómo murió ésta

El jurado se constituirá hoy ante la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Las Palmas. Aunque en un principio se había señalado la declaración del acusado para el próximo lunes, 5 de junio, finalmente comparecerá en la sesión inaugural de la vista, según han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC).  

Los hechos

El crimen por el que se juzga a Raúl Díaz tuvieron lugar el 1 de enero de 2019. Según el escrito de la Fiscalía, éste acabó con la vida de Romina Celeste, de 29 años, en la casa que ambos compartían en Canarias. Según dicho escrito lo hizo “al considerarla un ser inferior con el que podía desatar su rabia y ello por el hecho de ser una mujer joven, extranjera y sin recursos que ejercía la prostitución para mantenerse económicamente”.

El procesado, en teoría, quemó su cuerpo en una barbacoa a la mañana siguiente de haber acabado con su vida y la arrojó al mar en distintos puntos de la costa en Lanzarote, lo que hizo imposible que se recuperara el cadáver.

Durante los días siguientes, Raúl Díaz hizo creer a amigos y vecinos que Romina se había marchado de la casa tras una discusión. De hecho, la mañana del 8 de enero, una semana después de los hechos, se presentó en un puesto de la Guardia Civil para denunciar la desaparición de su pareja.

Éste fue detenido cinco días después y el juez ordenó su ingreso en prisión provisional, donde se mantuvo hasta el pasado mes de enero. Pasó el máximo tiempo que se puede en prisión de forma provisional (cuatro años) y desde enero se encuentra en libertad vigilada. Ha tenido que comparecer todos los lunes en sede judicial desde entonces.

Dilaciones en la causa

Tal y como ha compartido eldiario.es, la Audiencia de Las Palmas investigó las dilaciones en la instrucción de esta causa, que se demoró cuatro años y por la que pasaron tres jueces. En su informe, el presidente de este órgano judicial provincial, Emilio Moya, concluyó que no había indicios de una actuación irregular en el procedimiento.

 Moya destacó que se trataba de un asunto “muy complejo”, porque se investigaba un homicidio “sin que exista cadáver”, lo que hizo necesario “numerosas pruebas” que podrían haber dilatado los tiempos.

 

 

 

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