La detención tuvo lugar el pasado lunes, 6 de marzo, en la localidad cordobesa de Fernán Núñez después que unos padres, entre 20 y 30 años de edad, llevaran a su hija de pocos meses al Hospital Reina Sofía de la capital.

La menor presentaba múltiples heridas y fue inmediatamente ingresada en el centro hospitalario donde actualmente continúa recuperándose de las agresiones. Se desconoce, por el momento, cuál es su estado de salud. 

Cuando los sanitarios vieron la situación en la que estaba la bebé notificaron los hechos al Área de Protección al Menor (Aprome) pertenecientes a la Unidad de Policía Adscrita a la Comunidad de Andalucía, aludiendo a que las lesiones que presentaba la pequeña eran compatibles con un caso de maltrato.

La Policía Nacional abrió una investigación y acabó deteniendo a sus progenitores, que pasaron a disposición judicial y que ingresaron el prisión provisional el 7 de marzo ante la gravedad de los hechos. El pueblo en el que residían los padres de la menor se encuentra consternado ya que ambos eran personas conocidas en el municipio.

El Ayuntamiento de Fernán Núñez, que está al tanto de la detención de los progenitores, prefiere ser cauteloso al respecto y no pronunciarse sobre este caso mientras la investigación esté activa y no disponga de un informe oficial acerca de los acontecimientos.

Será la Policía Nacional la que termine de esclarecer, tras las pesquisas necesarias, los hechos que ya se encuentran en manos de la Justicia.  

El papel de los Servicios Sociales

El Área de Protección al Menor (Aprome) de la Policía Adscrita está integrada por funcionarios policiales especializados en la detección e investigación de situaciones de riesgo y desprotección de menores de edad que trabajan de forma conjunta con los diferentes Servicios de Protección al Menor de la administración autonómica.

Cuando desde un centro educativo o sanitario los profesionales notifican una posible actitud negligente de unos progenitores hacia su hijo o hijos, los Servicios Sociales comienzan a estudiar la situación e intervienen en los casos en los que queda demostrado que la integridad y desarrollo del menor puede estar en riesgo.

Con esto, y según recoge el portal de Servicios de Protección a Menores de la Junta de Andalucía, “las acciones de protección de la Administración hacia los menores tienen como objetivo fundamental garantizar el bienestar infantil”. En este sentido la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdadvela por la protección de los derechos de los niños y niñas con el apoyo de órganos como el Observatorio de la Infancia.  

Desde ese momento los menores pasan a estar tutelados por la Junta de Andalucía y residen en centros de menores protegidos o con familias de acogida hasta que cumplen los 18 años.

En algunas ocasiones las familias de acogida son miembros de la familia extensa del menor, que debe velar por su bienestar en todo momento. También en algunos casos el menor puede ver, ocasionalmente, a sus padres biológicos.

La Junta de Andalucía cuenta con el teléfono 900 851 818 para la notificación de posibles situaciones de maltrato infantil. Se trata de un servicio gratuito de atención a la ciudadanía, disponible durante las 24 horas de los 365 días del año, atendido por un equipo de profesionales especializados, con el que se intenta facilitar la comunicación de los posibles casos de malos tratos a menores que se conozcan.

También se pueden realizar las comunicaciones a través de WhatsApp en el 689 96 75 01, disponible en horario continuado las 24 horas del día.