Las patologías gastrointestinales también erosionan la salud mental

La salud mental de los pacientes con enfermedades gastrointestinales en España se encuentra especialmente comprometida. Según un informe internacional promovido por Takeda, el 78 % de estas personas padece ansiedad, depresión o pensamientos suicidas, el porcentaje más alto entre los seis países analizados (Alemania, Francia, Italia, Reino Unido y Canadá).

El estudio, basado en una encuesta realizada a más de 6.000 personas y 100 profesionales, revela que más de la mitad de los pacientes españoles convive con síntomas frecuentes como dolor abdominal, hinchazón o urgencia intestinal, y un 6% sufre crisis diarias. Las consecuencias se extienden al ámbito laboral y personal: casi la mitad ha tenido que ausentarse del trabajo y un tercio admite que su enfermedad ha perjudicado sus relaciones sociales, románticas o sexuales.

Los datos también evidencian deficiencias del sistema sanitario. Tres de cada diez pacientes esperaron más de seis meses para obtener un diagnóstico, y un 56 % declara dificultades para acceder a especialistas, especialmente en salud mental. A pesar de ello, un 66 % considera que sus tratamientos se acuerdan conjuntamente con el equipo médico. El informe, que forma parte del proyecto internacional GI Perceptions Audit, refleja además una importante brecha de comprensión social. España es el país donde más pacientes sienten que su enfermedad no se toma en serio (45%).

No obstante, el conocimiento general sobre estas patologías es alto, con un 68 % de los encuestados familiarizados con la Enfermedad Inflamatoria Intestinal. “Este informe pone de manifiesto la necesidad urgente de aumentar la sensibilización y de atender de forma integral aspectos clave como la salud mental y el impacto laboral y personal”, señala Alonso Fernández, portavoz de Takeda.