Agua, grasas, proteínas, hormonas, nutrientes, minerales, células madre (más que la médula ósea)… La sangre menstrual no es solo el resultado de un proceso natural, sino que inicia otro ciclo reproductivo  en tu vida. Sin derramamiento de sangre, sin guerra, sin heridas. Un cóctel de minerales que generan fertilidad y es símbolo de la propia madre naturaleza. ¿Entonces, por qué no cambiar el tabú y comenzar a buscar otros usos para la sangre menstrual? Esta es la pregunta que núcleos de la medicina alternativa y las nuevas corrientes naturalistas se están comenzando a plantear. 

''La sangre menstrual está constituida por dos sustancias especialmente maravillosas: sangre y endometrio. La sangre es nuestro líquido más preciado y el endometrio es la piel interna del útero, encargada de recibir y nutrir al futuro ser. ¿Cómo es posible que estas dos sustancias, fuentes de vida, puedan producir asco o aversión? Si fuésemos más sabios y más justos dedicaríamos las más anchas avenidas y los más encendidos poemas a glosar esta magnífica mezcla que produjo las condiciones necesarias para que germinásemos en el interior del seno de nuestra madre'', expone en su libro Genus: genitales y generación Joserra Landarroitajauregi. 

En este sentido, en los últimos años,  ha habido muchos artículos y estudios sobre la composición de la sangre menstrual. Ahora se sabe que la sangre menstrual contiene células madre, elementos esenciales en muchos tratamientos de belleza, así como nutrientes puros e importantes como el zinc, el cobre y el magnesio. Una prebase para las cicatrices del acné y para aportar a nuestra piel una apariencia más brillante y suave.

En redes, esta tendencia que nace de otras corrientes conocidas como 'free bleeding'' o "sembrando la Luna", está inspirada en unas tradiciones ancestrales que celebran la sangre menstrual y tratan de naturalizar la regla y darle el poder ancestral y sanador que le corresponde.  Ahora, un grupo de influencers y aventureras que buscan una alternativa natural de salud y belleza han probado la eficacia de la mascarilla menstrual. A pesar de la falta de evidencia científica, muchas personas que usan la sangre menstrual como mascarilla dicen notar cambios significativos en sus rostros. ¿Cuáles son sus beneficios?, ¿Cómo aplicarla? Te lo contamos en este artículo. 

Ver esta publicación en Instagram

Una publicación compartida de MARIANA CROW (@lacrowm)

BENEFICIOS SOBRE LA PIEL

Este 'microuniverso de nutrientes', como lo definen sus seguidoras,  no se sabe si es funcional debido a sus células madre o a sus nutrientes, pero se sospecha que tiene una poderosa habilidad de ser absorbida por la piel y crear un efecto sorprendente de  en el rostro. Uno de sus componentes más importantes son las células madres, que en muchos tratamientos de belleza se usan como «anti-age». Muchas mujeres utilizan su sangre menstrual con usos dermatológicos, para crear una mascarilla híper nutritiva que actúa contra las arrugas, las manchas, el acné y  tiene un fuerte poder antiinflamatorio. 

Así que sí, si realizas con frecuencia este tratamiento, puede compararse con un tratamiento de rejuvenecimiento, pero natural y gratis. Eso sí,  no hay estudios de que una mascarilla de sangre menstrual pueda ayudarte a retardar el envejecimiento o a que las impurezas de tu rostro se vayan. 

En este sentido, una de las pioneras en esta práctica es es Susan Ricalde Blume quien expresa a través de posts en Facebook su estilo de vida e intenta transmitir los beneficios de este tipo de 'rituales' que te reconectan con tu naturaleza y tu amor propio. Según Blume, la sangre menstrual solo se 'desecha' o se elimina del cuerpo porque no ha habido un embarazo y no ha sido usada para recibir la gestación dentro del útero. La sangre menstrual, según indica, es estéril y solo estará contaminada según el estilo de vida de la persona, la alimentación, el uso de productos químicos o la toma de medicamentos. 

SUSAN RICALDE BLUME

Entendida como fruto, nuestra sangre menstrual tiene una riqueza física y simbólica ciertamente aprovechable: podemos utilizarla como mascarilla o colocarla en la tierra para fomentar el crecimiento saludable de nuestras plantas. También podemos, de manera simbólica, ''sembrar nuestra menstruación'', intencionando nuevas realidades y experiencias en nuestras vidas, indica en otro post en su cuenta de Facebook.

CÓMO APLICARLA

• Recolectar la sangre menstrual con la copa menstrual, vaciarla en un vaso para poder empezar a maniobrar con ella.  Tenga en cuenta que la sangre menstrual "más reciente" es mejor. Para asegurar la utilidad de la sangre menstrual, es mejor no dejar pasar demasiado tiempo entre la extracción y el uso. Tenemos que asegurarnos de que sus nutrientes se mantengan en perfectas condiciones, por lo que, a menos que tengas que hacerlo "en el acto", es mejor mantenerla fría en la nevera.
• Cuando vayas a comenzar tu rutina, no olvides mezclarla con agua antes de aplicarla. Con el dedo o algodón, empezar a colocar la sangre menstrual sobre el rostro. Dejar reposar durante 20 minutos. 
• Limpiar con agua tibia abundante hasta que los restos de sangre menstrual desaparezcan del rostro. Repetir el proceso durante 3 días. 

CONTRAINDICACIONES

Es importante señalar que la sangre menstrual es estéril, sin embargo al estar en contacto con alguna Infección de Transmisión Sexual en los genitales –como el Virus del Papiloma Humano o Herpes– puede ser contraproducente usarlo como mascarilla facial. Por lo que en caso de contar con alguno de estos virus activos, no es recomendable usarlo como mascarilla facial ya que podrá transmitir la infección al rostro, indican desde sensualintim. 

Otros críticos de la tendencia señalan que existen riesgos en el uso cosmético de la sangre menstrual, ya que puede contener hongos y bacterias.  La sangre del endometrio está limpia, pero cuando pasa por el conducto vaginal se infecta con bacterias y hongos que son naturales en esa zona del cuerpo, pero no en otras, y podrían causarte infecciones en la cara.

La naturaleza es muy inteligente y si el cuerpo desecha o expulsa algo, no debemos ''reutilizarlo'' para otros fines que no tienen nada que ver con ella.  Esta práctica recuerda un poco a la moda de comerse la placenta, otra 'extravagancia' a la que sus seguidores le atribuyen resultados 'mágicos' y con grandes propiedades para el organismo.

Por otro lado, los expertos y hasta los propios seguidores de estas tendencias, advierten de que la sangre menstrual no es apta para consumo humano, al menos NO para ingerirla. Esto puede asociarse directamente a la transmisión de enfermedades, hongos e infecciones, por lo que lo desaconsejamos totalmente.

Otra de estas excepciones -y que considero que NO son aptas para reutilizar la sangre menstrual- es si consumimos productos de higiene menstrual desechables (tampones y compresas tradicionales). La explicación principal es que muchos de esos productos contienen tóxicos y perfumes que podrían ''contaminar'' tu sangre menstrual.