Medicina estética

Ácido hialurónico: Propiedades y beneficios del ingrediente de moda estética más famoso

Descubre las ventajas de aplicar ácido hialurónico en invierno.

Descubre las ventajas de aplicar ácido hialurónico en invierno. / M. G.

El ácido hialurónico es uno de los componentes estrella de la cosmética de los últimos años. El uso de este ingrediente no es fruto de una moda fugaz y sus beneficios se multiplican a medida que avanza la investigación. Más allá de su frecuente y ya normalizado uso estético, podemos encontrar este compuesto en alimentos y en una amplia y diversa cantidad de productos, desde cremas faciales, ampollas y sérum, hasta fórmulas after sun. La razón: es uno de los mejores ingredientes para cuidar y rejuvenecer la piel.

QUÉ ES EL ÁCIDO HIALURÓNICO 

El ácido hialurónico es un glicosaminoglicano, una sustancia vital de origen natural que forma parte de la matriz de la piel. Como el principal glicosaminoglicano en la piel, el ácido hialurónico trabaja para mantener cada aspecto de la piel estable, protegido y constantemente renovado.

El ácido hialurónico también es un humectante, que es una categoría de ingredientes para el cuidado de la piel que son higroscópicos, lo que significa que extraen la humedad de su entorno. Los humectantes se encuentran a menudo en humectantes a base de agua, sueros y otros productos para el cuidado de la piel sin enjuague debido a su capacidad para ayudar a aumentar la hidratación para todo tipo de piel, lo que es especialmente beneficioso para la piel seca y deshidratada.

El ácido hialurónico es una sustancia totalmente natural, pues está presente en nuestro organismo. También está presente en otros organismos o tejidos de nuestro organismo, como, por ejemplo, las válvulas cardíacas, el pulmón, la aorta, el tejido esquelético, la próstata, el cordón umbilical, el líquido sinovial o el humor vítreo.

Una de las principales cualidades de este ácido hialurónico es la capacidad de retener el agua y atraerla como una esponja para mantener la piel  hidratada, elástica, tersa y con volumen. Es capaz de retener hasta 1.000 veces su propio peso en agua, lo que lo convierte en un hidratante óptimo para todo tipo de piel.

CÓMO AFECTA SU PRODUCCIÓN CON LA EDAD

La capacidad del ácido hialurónico de retener la humedad es de gran relevancia para tratar el envejecimiento de la piel. Cuando somos jóvenes, nuestra piel retiene el agua y mantiene un equilibro adecuado de humedad.

A medida que envejecemos se reduce la producción de ácido hialurónico en nuestras células, con lo que la piel ya no puede retener la misma cantidad de agua. A partir de los 50 años, la cantidad de ácido hialurónico del organismo se reduce en un 50%. Nuestra piel ya no está tan hidratada y los signos de la edad se marcan más en ella, provocando flacidez, tirantez, arrugas, pérdida de volumen y descolgamiento del contorno facial. 

PROPIEDADES 

  • Su principal ventaja es su capacidad para reponer la hidratación de la piel.
  • Revitaliza las capas superficiales externas de la piel, para que se vean más suaves y lisas.
  • Alisa las líneas de expresión y las arrugas.
  • Mejora la elasticidad de la piel y la redensifica.
  • Promueve la creación de colágeno, sostén de la piel.
  • Reducir y prevenir manchas de la edad y problemas de pigmentación
  •  Defender la piel contra factores ambientales y contaminantes.

BENEFICIOS SEGÚN LA EDAD 

Según se expone en AcoFarma,  los beneficios del ácido hialurónico van cambiando con el paso de los años y las necesidades de cada piel, los genes o el estilo de vida. A nivel orientativo estas son las recomendaciones y beneficios de su uso dependiendo de la edad: 

Alrededor de los 30 años:

Habitualmente, los cambios en la piel empiezan a notarse a partir de los 30 años. A partir de esa edad, se pueden notar los primeros signos de envejecimiento de la piel, como la marca de algunas líneas de expresión y la aparición de las primeras arrugas.

Para contrarrestarlo, es útil recurrir a los beneficios del ácido hialurónico, que ayudará a rellenar las arrugas y a recuperar el aspecto joven.

Entre los 40 y los 50 años:

A partir de los 40, el principal problema de la piel es la flacidez y la pérdida de volumen, así como la reducción de los contornos faciales.

A partir de los 50 años:

Con la llegada de los 50, la preocupación se centra en dos problemas básicos de la piel: la pérdida de elasticidad y la profundización de las arrugas.

En ambos casos, para solucionar los problemas que aparecen a partir de los 40 y 50 años, es recomendable recurrir a una crema facial de día con ácido hialurónico, que permitirá corregir los efectos del envejecimiento, hidratando la piel y ayudando a rellenar las arrugas.

Al mismo tiempo, antes de ir a dormir, será importante aplicar una crema de noche tras el tratamiento diario de limpieza facial.

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